Carpaccio con melón y parmesano

Un poco de audacia en la cocina viene de maravilla para sorprender a nuestros comensales y dejarles satisfechos. El carpaccio de melón y parmesano es un atrevido plato que combina dulce y salado con finas láminas de carne marinada. Todo un éxito culinario.

Como vemos, el carpaccio lleva entre sus ingredientes principales finísimas lámina de carne cruda marinada en zumo de limón, aceite y especias.

Este plato lo ideó un chef para complacer a una condesa que deseaba alimentarse a base de carne cruda. El nombre “carpaccio” hace honor a un pintor muy famoso de la época, que utilizaba colores muy parecidos a los de este plato.

Al comienzo solo se preparaba con carne de buey. Pero con el paso del tiempo, cocineros innovadores probaron con pescados, mariscos y carnes poco convencionales como la de avestruz o nutria. Actualmente, el carpaccio tiene versiones vegetales y frutales con naranja, mango, melón o sandía.

Para preparar un buen carpaccio en casa se deben tener en cuenta unos pocos trucos. En primer lugar, la carne que elijamos tiene que ser de excelente calidad, lo que nos garantiza su frescura.

Segundo, para poder cortarla en láminas casi transparentes debemos congelar la carne. Cuando la sacamos del congelador y está a medio descongelar aprovechamos para laminarla, así es más fácil. Obviamente, tenemos que afilar bien el cuchillo.

Como último punto de la preparación, aliñamos la carne y la dejamos macerar alrededor de 10 minutos como mínimo para que tome sabor. ¿Listos para hacer el mejor carpaccio?

Ingredientes:

200 gr. de carpaccio de ternera

4 rodajas de melón

120 gr. de queso parmesano

Para el aliño:

• 1 cucharada de salsa inglesa
• Una cucharada de mostaza al vino blanco
• ½ cucharadita de miel
• Aceite de oliva
• Sal

Opcional:

• Un poco de rúcula

Preparación de carpaccio con melón y queso parmesano:

1. Preparamos el aliño mezclando todos los ingredientes en un cuenco. Añadir aceite de oliva hasta lograr la consistencia deseada. Batir con la ayuda de varillas para que quede una salsa emulsionada.
2. Laminamos la carne muy finamente. Con una cuchara especial saca bocados, hacemos bolitas de melón.
3. Disponer la rúcula en un fuente, encima el melón y la carne.
4.  Rociamos con el aliño generosamente. Por último, espolvoreamos el queso parmesano rallado grueso. Dejamos reposar 10 minutos y servimos.

¿Difícil? ¡Para nada! El carpaccio con melón y parmesano es tan sabroso que será todo un éxito en tu mesa. Pero no olvides de elegir una carne de calidad.