Smoothie de mandarinas y jengibre
Smoothie de mandarinas y jengibre, un delicioso batido dulce y lleno de vitamina C y beta caroteno. En otro artículo de Okdiario-recetas hicimos sorbete de limón light. Hoy preparamos smoothie de mandarinas y jengibre.
Beneficios de las mandarinas
España es el segundo productor de mandarinas del mundo, el primero es China. Sin embargo nuestras mandarinas son las más consumidas en la Unión Europea. Si vives en cualquier país de de Europa posiblemente las mandarinas que compres en tu supermercado procedan de España. La temporada de mandarina comienza a partir de finales de octubre, noviembre, diciembre, enero, febrero y marzo. Las mandarinas son híbridos de las naranjas, aunque su sabor es más aromático, dulce y se pelan con mayor facilidad. Son frutas muy apreciadas por los niños, como una golosina natural.
Las mandarinas o clementinas tiene 35 calorías por cada ración de 100 gramos. Aportan una buena cantidad de vitamina C, al igual que las naranjas, además de calcio, potasio, y fibra alimentaria. Su sabor resulta más dulce o menos ácido que el de las naranjas sin embargo aportan menos hidratos de carbono. Las mandarinas son ricas en potasio 181 mg por ración de 100 gramos. El potasio es importante para la salud de las articulaciones, además para prevenir el dolor de cabeza, y contribuye a una buena digestión. El color de las mandarinas tiene un responsable, el beta-caroteno que es un antioxidante precursor de la vitamina A. El betacaroteno es beneficioso para la piel, la salud ocular y para el corazón.
El jengibre por otro lado es un tubérculo muy apreciado en la gastronomía China así como en los paises anglosajones, donde usan el jengibre para todo. Desde el té de jengibre a las galletas. El jengibre es un regalo de la naturaleza tiene vitaminas, antioxidantes y aceites esenciales. Sus propiedades beneficiosas para la salud son conocidas desde hace miles de años, es uno de los ingredientes claves en la medicina tradicional china.
Smoothie de mandarinas y jengibre
Ingredientes
Preparación
Comenzamos pelando las mandarinas, dejándolas sin restos de piel blanca, que amarga. Quitamos los piñones de cada gajo si los tienen. Las ponemos en la licuadora o batidora. Añadimos la leche de almendras y el hielo, así como el aroma de vainilla. También la pizca de sal, muy poco pero la sal ayuda a potenciar el resto de los sabores. Triturar varios segundos.
Si la textura algo densa no te importa tomarlo tal cual, la pulpa tiene vitaminas y fibra así que es beneficiosa. Sin embargo si prefieres que el batido esté más liquido pasar el líquido por un colador para quitar resto de pulpa que hayan quedado. Para finalizar puedes rallar un poco de jengibre en cada batido, le da un sabor ligeramente picantito que combina bien con el sabor dulce de las mandarinas.
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