CHAMPIONS LEAGUE

¡Cómo hemos cambiado! Se cumple un año del 0-4 que hundió a Benítez

Zidane
Benítez y Zidane como entrenadores del Real Madrid.
Iván Martín

Se cumple un año del día en que el Real Madrid tocó fondo. Un aniversario de que el Barcelona, sin Messi, goleara por un contundente 0-4 a un conjunto blanco dirigido por Rafa Benítez. 12 meses después, las cosas han cambiado mucho por Chamartín. Un entrenador nuevo, una actitud mejorada, una Champions League más que brilla en las vitrinas del Santiago Bernabéu y un ambiente inmejorable han hecho que esa noche para el olvido se haya superado con total normalidad.

Aquella noche se celebró el Clásico más seguro de la historia. Los atentados de París días antes provocaron que la seguridad fuera máxima. El ambiente era frío para el duelo que se esperaba. Un minuto de silencio terminó de congelar a un Bernabéu que no podría ni esbozar una sonrisa durante los 90 minutos que duró la tortura. Benítez, al contrario que Zidane el pasado sábado en el Vicente Calderón, optó por contentar al plantel, traicionarse a sí mismo y no por ganar la contienda alineando un once en el que no creía.

No creyó nunca en esa formación y renunció a la que le había llevado invicto a aquel duelo. El Madrid fue vapuleado por el eterno rival de principio a fin. El Bernabéu por primera vez en mucho tiempo dijo basta y, aunque esa noche no firmó el finiquito, por todos era sabido que estaba fuera. La agonía se alargó hasta el 4 de enero, pero por Reyes Benítez tuvo carbón y el club blanco se regaló a un nuevo pastor que le está llevando por el camino del éxito y el bienestar.

Zidane devolvió la felicidad

Zidane aterrizó en Chamartín para cambiarlo todo. 2016 comenzaba con caras largas por La Castella, todavía dolían las heridas de aquel infausto 2015 donde todo salió mal, pero el escuchar el nombre de Zinedine Zidane 10 años después por la megafonía de Chamartín provocó que la parroquia blanca viera luz a final del túnel. En el momento de las alineaciones el speaker pronunció: «¡Entrenador, Zinedine…!». El Bernabéu cogió aire para gritar el único nombre que se escuchó aquella noche: «¡Zidane!». El Bernabéu no había perdonado todavía a sus jugadores. El Madrid goleó y el camino comenzó.


Lo que vino después ya es sabido por todos. Quitando aquel tropezón frente al Atlético de Madrid, todo han sido sonrisas. Una casi remontada en Liga que estuvo muy cerca de ser histórica, con victoria en el Camp Nou incluida, un paseo triunfal por la máxima competición europea que terminó con la conquista de la Undécima en Milán, la remontada ante el Sevilla en verano para lograr la Supercopa de Europa y una gran arranque de esta temporada donde la última gran gesta llegó hace unos días en la victoria en el derbi. El Madrid ha dado un giro de 180º en un año. Cómo hemos cambiado.

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