Guardiola alarga su lista de excusas en Europa

El título de míster en Inglaterra se da nada más llegar, pero Pep Guardiola ha tenido que esperar más de ocho meses para ponerle apellido al mismo. Y curiosamente es el mismo que ha recibido desde que debutara como entrenador en la temporada 2007/08: míster excusas.

Barcelona, Bayern Múnich y ahora Manchester City bien saben que las derrotas que sufre en el campo siempre tienen como mínimo un pretexto fuera de él, y lo volvió a demostrar después de que su equipo quedara eliminado de la Champions en octavos a manos del Mónaco: «En la segunda parte tuvimos ocasiones, no las convertimos y por eso estamos fuera».

«Y el balón parado es muy importante a este nivel. Barcelona y Real Madrid marcaron así la semana pasada. Mejoraremos, pero esta competición es muy exigente. A veces hace falta ser especial y afortunado, y nosotros no lo fuimos», añadió en la rueda de prensa posterior incorporándolas a su amplio historial.

Todo comenzó en 2014. Después de lograr dos Ligas de Campeones en cuatro campañas al frente del Barça, a Guardiola le tocaba ahora volar fuera del nido -con año sabático entre medias- y el Bayern de Múnich iba a ser su primera experiencia en el extranjero.

Sin embargo, lo que no se podía imaginar el técnico catalán, es que iba a ser humillado en semifinales por su eterno enemigo, el Real Madrid, por lo que sacó por primera vez en Europa su retahíla de excusas precisamente en la ida (1-0), lo que se le volvió en su contra en la vuelta (0-4): «Es imparable a la contra. Son atletas y si les dejas correr, en esta cuestión del ida y vuelta es un riesgo».

En la siguiente edición, su ex equipo iba a ser entonces la bestia negra en la misma ronda. El Camp Nou fue esta vez el testigo de otra vergonzante derrota (3-0) del de Santpedor en la ida, a la que siempre tenía justificación: «Íbamos bien, pero el talento marcó la diferencia». «Cuentan con Messi, el mejor», soltó esta vez en la vuelta (3-2).

La tercera debacle consecutiva en Champions de Guardiola con los bávaros -todas en semifinales- iba a llegar de la mano del otro conjunto español de élite que faltaba, el Atlético de Madrid: «Nosotros contra equipos defensivos hemos podido trabajar bien, pero en Madrid no logramos marcar y eso fue clave». «Mi idea era ir adelante, tener el balón y tener ocasiones pero nada», finalizó resignado tras caer 2-1 en el global.

El discurso fácil con el City

No es la primera vez que Guardiola pone excusas en el Manchester City. Tras otra nueva contundente derrota ante el Barça (4-0) en la fase de grupos de la Champions, el técnico catalán siguió con su repertorio de evasivas: «Con 11 jugadores el partido estaba igualado, con 10 estuvo acabado».

«Somos un equipo nuevo, nos estamos conociendo y es un proceso que viene de estar 35 años sin estar en Europa», finalizó el mismo ganándose un mote más al que añadir al de Filósofo que acuñó Ibrahimovic.