¿Volverá a tirarse ‘Luisito Piscinas’?

¿Volverá a tirarse ‘Luisito Piscinas’?

Dentro de las muchas incógnitas que rodean el Clásico de vuelta de la Supercopa de España, una, referente a lo antideportivo y a lo permisivo por parte del estamento arbitral, reluce con fuerza. Luis Suárez es uno de los jugadores más consentidos del fútbol español, y su último piscinazo en un encuentro importante no solo no fue castigado sino que resultó premiado por parte de De Burgos Bengoetxea. En el Santiago Bernabéu y necesitado de remontar un marcador adverso, el charrúa necesitará tirar de sus mejores artimañas para producir cosas en el marcador.

¿Volverá a tirarse entonces Luisito Piscinas? La historia reciente nos dice que sí. Suárez ya se ganó fama de teatrero en Holanda, Inglaterra, y con su selección, pero su fichaje por el Barcelona parece haberle elevado a otro nivel. Dentro de un club en el que el teatro y la simulación están a la orden del día –Busquets, Alves, Neymar, Alba…–, Lucho se siente como en casa, y fruto de su competitividad, quiere destacar entre sus semejantes.

Por ello, sus caídas siempre están bien elegidas, y diferenciándole éste de Busquets o Alba, más dados al desmayo en cualquier parte del terreno de juego, Suárez lo hace en el área, sus cercanías, o en una ocasión de peligro. Le ocurrió en el último Clásico, donde engañó a De Burgos con su técnica perfeccionada, y le pasó también en el Barcelona-PSG de la última Champions.

Memorias del Aytekinazo

Uno de los episodios más recordados del Aytekinazo es el de Luisito Piscinas tirándose como si le hubieran matado en el área en PSG, con 4-1 en el marcador y cada vez menos minutos para remontar. El colegiado, archiconocido a partir de ese día, señaló la pena máxima sin dudarlo, pero a Suárez, Marquinhos solo le había rozado. El final se lo conocen todos.

Mientras a Luis Suárez no le impongan una sanción ejemplar no va a parar de tirarse descaradamente en cada partido. Ya son varias las ocasiones en las que finge, y otras tantas en las que pega sin balón a sus marcadores sin el balón en juego y simulando aspavientos o aprovechando que el árbitro mira hacia otro lado. El respeto que ha ganado como gran delantero, lo ha perdido como estafador profesional en los encuentros del Barcelona. Luisito Piscinas volverá a la carga el miércoles en el Bernabéu. ¿Volverá a actuar?

 

 

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