«No nos equivocamos al renovar a Ayón»

Los éxitos del Real Madrid la pasada temporada provocaron que la lupa de la NBA se centrara en una de sus estrellas a final de campaña. Gustavo Ayón, que llegó desde el otro lado del charco a la capital de España para convertirse en un jugador diferencial, protagonizó un culebrón que pareció no tener fin y en el que las dudas, las idas y las venidas, se han ido extendiendo –también tras su ampliación de contrato– hasta la unanimidad actual que se respira en el club. Renovar al Titán fue una buena decisión.

«A pesar de todo, no nos equivocamos al renovar a Ayón». Esta afirmación puede parecer obvia si nos centramos en las estadísticas del jugador en la temporada 2015-16, en la que fue, junto con Sergio Llull, el mejor jugador madridista. Sin embargo, el trato de Gustavo en las negociaciones estuvo lejos de ser el idóneo en muchos tramos, ante un equipo que lo dio todo y más para renovar a una de sus estrellas y que acabó, a pesar de la renovación, decepcionado con el jugador.

El pacto final se firmó por menos dinero de lo esperado y con una sensación de traición que provocó detractores del jugador en el seno del club, alegando que había traicionado al equipo blanco y solo aceptaba su continuidad una vez se convenció de que no tenía ofertas para volar a la NBA. Ayón iba a ser mirado con lupa desde el inicio y un arranque de temporada solo bueno, unido a los fichajes ilusionantes de Randolph u Othello Hunter hicieron plantear si había sido una buena decisión continuar contando con él.

En el equipo blanco hubo una persona que no lo dudó en ningún momento. Pablo Laso, al igual que hizo en verano, siempre estuvo convencido en la continuidad del mexicano y en la necesidad de hacerle importante para el devenir del Real Madrid. Hunter está haciendo una gran temporada y Randolph deja destellos de una estrella de dimensiones inabarcables para Europa, pero para conquistar la Euroliga y volver a convertirse en invencible, el Madrid necesita a Ayón, y en estas últimas semanas se ha encargado de demostrarlo.

Volvió el mejor Ayón

Diciembre ha sido el mes de confirmación del renacido Ayón en el Real Madrid. En la decena de partidos disputados por el equipo blanco, el pívot son ha bajado de los ocho puntos de valoración en un encuentro, el último frente al Efes, donde sufrió problemas de faltas que le llevaron a estar en negativo pero en los cinco últimos minutos ejerció de pilar en ataque y defensa, tapón ganador incluido, para aupar al equipo a la victoria.

Sin hacer ruido pero activando todos los caminos posibles hacia la producción –ha subido su aportación en asistencias y ataque al poste–, en lo tangible y lo intangible. Ayón solo quiere lo mejor para el Madrid, y en el equipo blanco ya han asumido que con él, siempre estarán más cerca de la victoria.