El socialcomunismo sólo abdica de sus principios cuando hay dinero a repartir

Port Aventura

Caramba cómo ha cambiado la izquierda. Ahora resulta que la Generalitat de Cataluña ha aprobado la construcción de un complejo de ocio que incluirá casinos y hoteles al lado de Port Aventura (Salou, Tarragona), muy próximo al parque de atracciones para el público familiar. Se acuerdan ustedes de cuando la izquierda montó una parda descomunal en Madrid a cuenta de Eurovegas, ese proyecto frustrado que, según la izquierda, iba a fabricar generaciones de ludópatas y traer la miseria intelectual. Dijeron que lo que se necesitaban no eran casinos, sino bibliotecas y acusaron al PP de fomentar el vicio. Pues ahora resulta que el PSC de Salvador Illa ha presionado a Pere Aragonés para que el proyecto vea la luz. El complejo se llamará BCN World (pese a estar en Tarragona) y será gestionado por la conocida compañía norteamericana Hard Rock, que adquirirá los terrenos -de en torno a un millón de metros cuadrados- a Criteria, el holding empresarial de La Caixa.

El objetivo para justificar su construcción al lado de Port Aventura es desestacionalizar el turismo en esa zona complementando el de ocio familiar con otras modalidades, sobre todo el de congresos, ya que actualmente toda la actividad se concentra en los meses veraniegos. Y así potenciar la Costa Dorada como destino de referencia en España. Este proyecto viene originalmente de 1986, cuando el Gobierno de Jordi Pujol planificó un gran complejo de ocio y turismo en esa zona de la costa tarraconense. El plan inicial ya contemplaba hoteles y casinos además del parque de atracciones, aunque finalmente sólo se construyó este último en 1995, que ocupa sólo 119 de las 825 hectáreas destinadas a este complejo.

Habrá qué preguntarse a qué se debe que la izquierda haya cambiado tanto. ¿Será porque hay dinero por medio y el proyecto se presta al trinque político? Estos sólo son capaces de abdicar de sus principios cuando huelen la pasta. Los casinos, para la izquierda, ya no son un lugar de perversión.

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