Carta a ‘La Manada’

Carta a ‘La Manada’
opinion-beatriztalegon-La-Manada-2018040-interior

No comprendo cómo un grupo de hombres puede comentar con semejante divertimento que se prepara para salir de fiesta y que, entre las cosas que han de organizar antes del viaje, están las herramientas para violar mujeres. Sé que estas conversaciones, por escrito, en un chat, no fueron admitidas como prueba por parte de los jueces. Pero eso no me impide quedarme boquiabierta al leer las barbaridades que habéis sido capaces de escribir, para después, además, hacerlas.

Planeasteis drogar a una mujer (o a varias, las que fueran) para así poder montaros vuestra propia peli porno. Está claro que para vosotros las mujeres somos eso: una especie de muñecas, cosas, a las que humillar, vacilar, engañar, y reventar de cualquier manera posible. Y lo hacéis además con cámara de video en mano, para luego enviarlo a los colegas en ese mismo chat donde ya preparabais la juerga.

Después de todo lo que hicisteis, además, le robasteis el móvil. Para que, imagino, no pudiera llamar a nadie pidiendo auxilio. La dejasteis tirada, sola y absolutamente destrozada. Entre vosotros había un Guardia Civil. Alguien que, se supone, en su día a día, ayuda a personas que se encuentran en la situación de esta muchacha. ¿Qué se puede tener en la cabeza cuando se hace algo así? ¿Dónde están los principios de un servidor público, que aunque no esté trabajando, debería saber que eso no se hace de ninguna manera? ¿Dónde están los principios y valores de todos los demás? ¿No tenéis madre, hermana? ¿Quién os ha educado a vosotros?

Por si todo lo que hicisteis fuera poco, después grabasteis otro vídeo riéndoos de ella. Uno de vosotros vacilaba sobre el hecho de haberla convencido para ir a dormir al portal. O sea, que en ese video queda bastante claro que ella os acompañó a ese portal porque buscaba un sitio para dormir. No fue con vosotros para montar ninguna orgía. Ella estaba sola y, según lo que vosotros mismos comentáis en ese otro video, le propusisteis ir a dormir a un portal que teníais ya identificado.

Os escribo esta carta procurando ser prudente. Con palabras sencillas para dirigirme a seres que, no sé si entenderán de lo que les hablo. Porque yo a vosotros no os entiendo. Ni vuestra manera de divertiros, ni vuestra falta de respeto hacia otros seres humanos, ni vuestra crueldad ni vuestra absoluta brutalidad.

La vida no es una película porno. Las mujeres no somos como esas actrices de vuestras fantasías. La vida no es un video y las burradas que habéis hecho no pueden quedar impunes. Por aquella mujer, pero también por todas las demás. Por nuestras hijas. Por las vuestras, si es que algún día las tenéis.

Desgraciadamente creo que estas palabras caerán en saco roto. Demasiado tarde para haceros entender de alguna manera que os habéis comportado como bestias. Ni siquiera los lobos serían capaces de hacer semejante cosa a las hembras de sus manadas. Vosotros estaríais expulsados de cualquiera de ellas.

Lo último en Opinión

Últimas noticias