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Los mejores remedios caseros para limpiar el coche

Limpiar el coche
Limpiar el coche con remedios caseros no solamente nos ahorrará unos euros, sino que además puede hacer que el resultado final sea todavía mejor que con los métodos tradicionales.

Si eres de los que miman su coche hasta niveles extremos -o, directamente, de los que no quiere dejarse un dineral en el lavadero- seguro que te pasas cada no mucho tiempo un buen rato tratando de dejarlo como los chorros del oro, ¿verdad? Pues bien, hoy vamos a tratar de ayudarte en esta ardua tarea dándote algunos trucos y consejos para limpiar de la manera más eficaz las diferentes partes del mismo.

La carrocería

La carrocería del coche es lo que más luce, ¿verdad? Pero no os preocupéis, porque es también la más sencilla de lavar, más allá de su extensión. Para dejar nuestro vehículo impecable por fuera tan solo necesitaremos un cubo de agua con unas gotas de jabón. Mojaremos entonces una esponja y procederemos a frotar la carrocería para después aclararla.

Los cristales

Dejar los cristales totalmente limpios sin huellas ni ‘bayetazos’ no es nada fácil. Para ello debes hacerte con vinagre blanco, el cual proyectarás sobre las ventanas con un spray dejando reposar el mismo unos minutos. Una vez hayas hecho eso, con papel de periódico lo secas y te llevarás una interesante sorpresa.

Las llantas

Las llantas es una de las piezas que más nos llaman la atención de los coches. De hecho, es también una de las que más cariño tenemos, ya que solemos haberlas elegido de forma específica. De esta forma, enfada bastante tenerlas sucias, algo inevitable por los frenos y la propia suciedad del entorno. Para dejarlas totalmente impolutas, podemos mezclar bicarbonato de sodio con agua. La pasta que se forma la utilizaremos para limpiar las llantas con un cepillo, dejando reposar la solución unos minutos antes de enjuagar.

El interior del coche

Para limpiar las superficies interiores del coche -no los asientos, que eso ya te lo explicamos- debes hacerte, de nuevo, con vinagre blanco, agua, un spray y un trapo. Mezclando al 50% los dos primers elementos, rociaremos con el spray la solución dejando que penetre sobre el material durante unos minutos. Después, con el trapo -papel de cocina también vale- procederemos a secar la zona.

Las alfombrillas

Las manchas de las alfombrillas se pueden quitar con una solución algo más enrevesada. Primero mezcla vinagre blanco con bicarbonato, aplicando la pasta sobre la mancha en cuestión con un cepillo o algo similar. Después, aspira los restos de bicarbonato para descubrir que el problema ha desaparecido. Esto también puede valer para las manchas en los asientos, por cierto.

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