La ITV se endurece: Controlará la centralita de tu vehículo
Pasar la ITV desde el año 2018 será más duro. Al menos eso es lo que se desprende del nuevo Real Decreto al respecto, que indica que las estaciones destinadas a este fin contarán desde el próximo ejercicio con los nuevos dispositivos que les permitirán inspeccionar los sistemas de seguridad electrónicos y de control de emisiones, tal y como ha informado la AECA-ITV, que es la asociación empresarial integrada por las empresas que prestan el servicio de la ITV, tanto públicas como privadas.
A día de hoy estos nuevos sistemas de medición se encuentran en fase de pruebas, ya que la nueva normativa obliga a todas las ITV cuenten con las herramientas para leer los ordenadores de a bordo de nuestros vehículos, informando de posibles averías o defectos en los sistemas que se han de controlar.
¿Qué significa todo esto exactamente de cara al usuario? Desde ahora podrán comprobar puntos como el sistema de identificación del vehículo, su kilometraje o dispositivos electrónicos como el control de estabilidad, el antibloqueo de frenos ABS, los airbags, el sistema de alumbrado y señalización, etc. Se prevé además una segunda gase en la que el control se volverá todavía más exhaustivo, incluyéndose en el mismo otros sistemas electrónicos más complejos como la cámara de visión nocturna o el limitador de velocidad.
Para que el operario de la ITV compruebe que todos estos sistemas están en perfecto estado de revista, éste solamente tendrá que conectar el dispositivo en cuestión, ya que las pruebas como tal se realizarán mediante una comunicación directa e interactiva entre el sistema de diagnóstico de la ITV y el ordenador del vehículo en un proceso totalmente automatizado. Quedan por dar a conocer algunos detalles como por ejemplo el número de fallos admitidos para declarar apto un vehículo o cuáles de estos serán considerados leves o graves.
