El nuevo Opel Ampera-e aumenta su palmarés de premios
El nuevo Opel Ampera-e no para de recibir elogios. El último de ellos llega en forma de premio, y es que el jurado de Best Cars, compuesto por 27 redactores jefe de la revista Auto Motor und Sport y sus publicaciones asociadas de 21 países, otorgaron al vehículo germano el Premio Internacional ‘Paul Piestch 2017’ por su innovadora tecnología. Además, el Ampera-e se impuso de una manera contundente, consiguiendo el 41% de los votos, con un 10% de ventaja respecto a su rival más cercano.
Este premio especial para las ideas tecnológicas más destacadas es un encuentro habitual desde 1989. Se llama en honor de Paul Piestch, ex piloto de carreras y co-fundador de Motor Presse Stuttgart. Las condiciones para optar a la nominación de una innovación son que esté lista para su producción en serie y aporte un gran valor añadido para los clientes en las áreas de medio ambiente, confort, seguridad o economía.
Los ingenieros de Opel consideraron todos estos aspectos a la hora de desarrollar el Ampera-e. De hecho, este nuevo modelo está abriendo, junto a otros, un nuevo capítulo en la electromovilidad con su autonomía de más de 500 kilómetros. Presentado en el Salón de París del año pasado, puede presumir de superar a su rival más cercano en su segmento en al menos 100 kilómetros de autonomía con una sola carga. Incluso de acuerdo con el ciclo WLTP (Procedimiento de prueba armonizado a nivel mundial para vehículos ligeros), el cual refleja el consumo de forma mucho más próxima a las condiciones reales de conducción, el Ampera-e ofrece una autonomía de 380 kilómetros. En el momento de la recarga, el Opel Ampera-e necesita apenas una carga de 30 minutos en un cargador rápido de corriente continua de 50 kW para lograr 150 kilómetros de autonomía.
En cuanto al rendimiento puro y duro, hay que recordar que el nuevo Opel Ampera-e tiene un motor cuyo par máximo es de 360 Nm, mientras que la potencia se va hasta el equivalente a 204 CV. De esta manera, el compacto eléctrico acelera de 0 a 50 km/h en 3,2 segundos, mientras que la recuperación de 80 a 120 km/h se completa con éxito en 4,5 segundos, y todo ello sin olvidarnos de una velocidad máxima limitada electrónicamente a 150 km/h.
