Entrevista exclusiva a Pilar Abel: «Los familiares de Dalí me apoyan»

Quiere Justicia. Pilar Abel lo tiene claro. La presunta hija de Salvador Dalí solo quiere ser reconocida como descendiente del maestro del Surrealismo español. Argumentos no le faltan. Recuerda al artista como un hombre con quien compartía gestos y miradas furtivas. Entre ellos había una conexión especial de la que nunca pudieron hablar. Sin embargo, Pilar tiene claro que el pintor la observaba y sigue mirándola desde donde esté. No pierde la esperanza, sabe que tarde o temprano, conseguirá su objetivo y en medio de su lucha judicial ha accedido a atender a LOOK para mantener una entrevista exclusiva.

Pregunta (P): Pilar, ¿cómo se siente tras las últimas declaraciones del ex alcalde de Figueras,  Marià Lorca, que dice haber sido confesor de Salvador Dalí en sus últimos momentos y asegura que el artista le reveló dos secretos, uno de ellos supuestamente relacionado con la existencia de una hija?

Respuesta (R): Mi padre o mi supuesto padre –como le queráis llamar- le hizo guardar dos secretos a Marià Lorca. Uno de ellos era que quería ser enterrado en Púbol y el otro es un secreto que no quiere desvelar, pero dice que saldrá a la luz con las pruebas de ADN. Con esta noticia estoy emocionada, estoy bien, positiva, pero también un poco melancólica.

P: ¿Se siente decepcionada con Marià Lorca por no habérselo dicho personalmente aun sabiendo los años de lucha que lleva recorridos?

R: No le guardo rencor. Son cosas de la vida. Si tuviera que estar decepcionada con la gente, lo estaría con el mundo entero. Estas noticias me dan más fuerza, porque veo que la gente empieza a hablar. Sé que hay mucha gente en mi contra, pero también sé que tengo mucha gente que me va a apoyar. A quien está en contra les respeto, pero, en realidad, paso. Como decía él (Salvador Dalí), mejor que hablen mal porque así piensan en ti. Me da igual todo. A mí lo que más me gusta es una juez que me ha abierto la puerta y el abogado que también me ha ayudado con los engaños de los letrados que tenía antes.

P: ¿Esta última noticia le ha hecho pensar en el fallecimiento de Salvador Dalí? Murió solo.

R: Claro que lo he pensado. Me ha corroído porque estaba solo. Si lo hubiera sabido,  hubiera salido corriendo y él no habría estado solo. Lo que más siento es que murió en su soledad, pero también sé que desde donde esté, me está escuchando.

«Me corroe pensar que mi padre murió solo»

P: Si Salvador Dalí era consciente de que tenía una hija, ¿por qué cree que no le buscó?

R: A lo mejor tenía sus motivos. Yo los respeto.

P: ¿Por qué sabe que él lo sabía?

R: Lo sabía porque, según mi madre, cuando me encontraba por la calle decía: “Esta es mi hija Pilar”. 

«Supe que era mi padre a los 6 años»

P: ¿Cuándo fue consciente?

R:  A los 6 o 7 años me lo dijo mi abuela

P: ¿En qué momento empezó a interesarse por la vida y la obra de Salvador Dalí?

R: Siempre me he interesado por la vida de Salvador Dalí. La noticia que me dio mi abuela marcó un antes y un después, pero luego mi abuela se murió y yo pasé de mano en mano. Yo no sé lo que es el calor de un hogar por eso he tenido cuatro hijas e intentado darles toda mi vida y a mis nietos, más.

P: . ¿En qué momento comenzó a mirarle con otros ojos?

R: Por su obra.  Yo no soy materialista. Me encanta el arte porque lo llevo dentro y me gusta. Su obra me gusta porque me llama. Por su vida siempre he estado interesada. Desde jovencita lo veía y él me miraba. Nos mirábamos. Mucha gente me pregunta que por qué no iba y le decía que era su hija, pero ¿cómo me voy a dirigir a una persona a decirle directamente que si era mi padre? Él debía pensar lo mismo que yo. A lo mejor, él tendría miedo a alguien.

«Siempre me ha interesado el arte, lo llevo en la sangre»

P:  Pasaron muchos años hasta que en el 2006 quiso reclamar su paternidad ¿Por qué? ¿Qué  ocurrió para que quisiera hacerlo?

R: Saliendo de la Casa Miralles con mi jefe  y una de mis hijas -no me preguntes qué me pasó porque no te puedo contestar-. Estábamos discutiendo sobre cuadros y pintores y yo dije: “Si supieráis quién es mi padre”. Me miraron y yo solo dije las palabras Salvador Dalí. Fue la primera vez que dije en alto aquel secreto que tenía. A partir de ese día, ya empezó la revolución.

P: ¿Cuántas pruebas de ADN se ha hecho?

R: Me he hecho tres. Una en San Sebastián de los Reyes a través de una máscara que llegó a mí, otra en París que supuestamente dio negativo, pero a mí nunca me dieron los resultados y una tercera con una famosa máscara que tengo bien guardada con su ADN.

P: ¿Por qué cree que no se quiere sacar a la luz?

R: Creo que hay unos intereses creados cuando yo solo estoy pidiendo una legítima. Lo otro ya se verá. Todo el mundo me pregunta por la herencia. Yo no me lo había planteado, pero me lo están haciendo plantear y estaría en mi pleno derecho.

P: ¿Qué relación tiene con la familia de Dalí?

R: Hace un momento estaba hablando con una sobrina que precisamente estaba criticando al exalcalde de Figueras por ocultarme tanto tiempo esas revelaciones de Dalí. También me ha dicho que a la familia directa no les invitaron a la ceremonia. Me anima mucho y es una persona que ha dado la cara por mí.

«Tengo muchas cosas en común con Dalí»

P: ¿Qué tiene en común con Dalí?

R: Tengo muchas cosas en común. Su carácter –lo tengo muy fuerte-, sus ojos, su expresión, su manera de hablar… Yo no me lo veo, me lo dicen los demás.

P: Pilar, se ha hablado de sus supuestos problemas económicos, ¿qué hay de cierto?

R: Yo soy la mujer más feliz del mundo. No tengo ninguno. Voy donde quiero y soy como quiero. Estoy cobrando una ayuda, pero también me defiendo. Soy vidente de nacimiento por un don. Si me dedicara a pintar, también pintaría. Lo que yo quiera hacer. No tengo ningún drama económico. Comparto piso con una amiga y nadie me paga nada, me lo pago todo yo.

«No tengo problemas económicos»

P: ¿Cuál sería el resumen del momento en el que se encuentra?

R:  No tengo ninguna prisa. Estoy muy tranquila. Tengo mucha fe en lo que va a salir, que salga la verdad. No me fío de nadie, pero de la juez, sí.