Isabel Pantoja hace un ‘dientes, dientes’ en Chile

Isabel Pantoja hace un ‘dientes, dientes’ en Chile
La cantante Isabel Pantoja, en una foto de archivo (Gtres)

“Por contrato, todos los artistas tienen que dar conferencia de prensa”, asegura Mauricio Jürgensen, uno de los críticos musicales que cubre desde hace años el Festival de Viña del Mar, en Chile. Pero como toda norma tiene su excepción, parece que Isabel Pantoja va a poner la nota discordante en esta edición del prestigioso festival internacional de música. Si no ha hablado en España –a excepción de la entrevista que pactó para ‘El hormiguero’-, tampoco lo hará fuera. Esa es la decisión más firme de cuantas ha tomado Pantoja en los últimos tiempos. Y parece que de ahí no la va a mover nadie. Al menos, por el momento.

Alex Hernández, director del prestigioso Festival chileno, manifestó hace semanas su intención de intentar convencer a la cantante hasta el último momento de que hablase para los medios de comunicación chilenos, pero fuentes cercanas a la tonadillera confirmaban a LOOK justo antes de poner rumbo a América que no tenía intención de romper su silencio allende los mares. “Lo que diga allí, se recogerá aquí, así que no hablará”.

Isabel Pantoja con su hermano Agustín

Isabel Pantoja con su hermano Agustín en su llegada a Chile (Gtres)

Isabel Pantoja se encuentra en Santiago desde el pasado lunes por la mañana junto a su hermano Agustín, su sobrina Anabel, y su hija Chabelita, que ha volado este martes para reencontrarse con su madre. También su hijo Kiko ha aprovechado el tirón de su madre para promocionar su música por primera vez en el país andino y, por ello, se encuentra también en el país. En la jornada de ayer, mientras Pantoja ensayaba con los más de 80 músicos chilenos con los que se subirá al escenario, Kiko Rivera daba sus primeras entrevistas promocionales en la televisión nacional mientras desmentía que fuese a cantar con su madre durante el concierto, un momento que lleva esperándose desde que la cantante inició su gira en Madrid el pasado 11 de febrero.

Isabel Pantoja

Isabel Pantoja con su hijo haciéndose ‘selfies’ en el aeropuerto (Instagram)

“Está muy feliz y nerviosa”, añadía Kiko en una de sus entrevistas promocionales. Y no es para menos. Su actuación en Viña del Mar es una de las más esperadas de esta edición y, sobre todo, “la más compleja”, según el director del festival. Tener a casi cien personas en el escenario es algo que jamás se ha hecho. Es todo un reto para la propia artista, que para sentirse más segura propuso al festival en un primer momento llevarse a los 80 músicos desde España, un desembolso impagable por la organización, que inmediatamente le puso a su disposición cuantos músicos chilenos necesitase.

Pantoja hará un show diferente al de su gira “Hasta que se apague el sol”. Su concierto en Viña del Mar es ante todo un homenaje a Juan Gabriel puesto que iba a ser él el que actuase en este evento. Su repentino fallecimiento obligó a la organización a pensar en una sustitución a la altura de la pérdida. “¿Quién mejor que ella? Ella y Juan Gabriel eran muy amigos. Ella acaba de grabar un disco con sus temas, le tenía un gran cariño… todo calzaba”. Así ha justificado en la prensa chilena Alex Hernández la elección de Pantoja, que esta noche reducirá sus tres horas de espectáculo a una hora y media, eliminando del mismo la copla y el flamenco. Protagonismo especial tendrán los temas de Juan Gabriel y canciones míticas de Isabel como “Marinero de luces”, que interpretará con el mismo vestuario que exhibió en Madrid y Barcelona y que ya está listo y preparado para mostrarse ante las 15.000 butacas de la Quinta Vergara.

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