Un «colaborador» del CNI implica a Victoria y Taboada en una trama de adjudicaciones en Lezo

Un «colaborador» del CNI implica a Victoria y Taboada en una trama de adjudicaciones en Lezo
El exconsejero de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, y el senador del PP, Jaime González Taboada.

Un «colaborador» del Centro Nacional de Inteligencia, CNI, ha implicado al ex consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, y al actual senador del PP y ex consejero de Medio Ambiente madrileño, Jaime González Taboada, en una trama corrupta de adjudicaciones investigada en el marco del caso Lezo.

Victoria fue consejero de Presidencia y Justicia de la Comunidad de Madrid entre 2012 y 2015, además de presidente del Canal de Isabel II durante el Gobierno regional de Ignacio González. Por su parte, González Taboada desempeñó el cargo de director general de Cooperación con la Administración Local de Madrid y de consejero de Medio Ambiente hasta octubre de este mismo año.

En la actualidad, Victoria está imputado en la trama Púnica, mientras González Taboada aparece en numerosas ocasiones en el sumario de dicha trama corrupta, no obstante, mantiene su condición de aforado al ser senador.

El «colaborador» del CNI que señala a Victoria y González Taboada en el sumario del caso Lezo se trataría de un ex militante del Partido Popular que declaró ante la titular del Juzgado de Instrucción nº 1 de Lugo, Pilar de Lara. Su declaración fue trasladada al Juzgado Central de Instrucción nº 6 de la Audiencia Nacional hace pocos meses al mencionar varios hechos relacionados con Ignacio González. Dicho ex militante del PP fue identificado como un «colaborador» del CNI por otros testigos que han declarado en la Audiencia Nacional en el marco del caso Lezo.

Según su testimonio, Salvador Victoria le «enchufó como conseguidor» en una constructora constituida en el año 2005 en Santiago de Compostela (Galicia) denominada Unika Proyectos y Obras SA, actualmente Uncisa Construcciones e Infraestrcuturas SA. El testigo aseguró a la juez de Lugo que cobraba en esta empresa 2.240 euros al mes y que su labor era «conseguir contratos de obras» entre los ayuntamientos de la Comunidad de Madrid, gobernados por el PP.

«A raíz de estar en Unika tuve conocimiento de unos hechos, los puse en conocimiento de la dirección nacional del Partido Popular y de la Comunidad de Madrid y lo único que me dijeron era que me fuera al juez yo, no hicieron nada. Su función insistía era «llegar a los alcaldes, enterarme de si iban a salir licitaciones, y diciéndoles que era del partido, presionarles para que se los adjudicaran a Unika».

«Unika me dice que tengo que presionar a… pues a alcaldes, a concejales… yo digo que no voy a hacer eso porque es un delito de tráfico de influencias y está penado. Nunca podíamos hablar por teléfono, ni dar nombres. Me mandaban mensajes por Telegram que se autodestruían al minuto», añade.

Tras conocer las supuestas prácticas irregulares de esta constructora, decide abandonar: «Cogí un día en el mes de enero», prosigue, «y le dije a Salvador Victoria: ‘Mira Salva, a mí esta empresa no me va, no sé como lo ves, pero esto es tráfico de influencias’». «Bueno pues déjalo», le replicó Victoria.

El supuesto «colaborador» del CNI también explicó a la juez de Lugo su relación con el ex presidente de la Comunidad de Madrid: «Mis baluartes en la Comunidad de Madrid eran Ignacio González y Salvador Victoria, mis personas más cercanas. Quiero creer que Ignacio González sí sabía que estaba trabajando en Unika».

Durante su declaración, desvela además que «encontró facturas por el 5% de las adjudicaciones conseguidas» de algunos proyectos y señala al que fuera director general de Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Gonzalo Aguado.

Declaración recogida en el sumario del caso Lezo.
Declaración recogida en el sumario del caso Lezo.

«Taboada tiene buenos coches»

El presunto colaborador del Centro Nacional de Inteligencia también acusó en su declaración al senador popular y exconsejero de Medio Ambiente, Jaime González Taboada.

Según su relato, Unika se presentó a dos licitaciones de la Consejería de Presidencia que dirigía Salvador Victoria y la constructora gallega se quedó fuera en una de ellas del Plan Regional de Inversiones de Madrid, Prisma, porque la oferta presentada era demasiado baja.

 

 

 

 

 

Lo último en Investigación

Últimas noticias