La ex directora financiera del Canal sale de prisión tras pagar la fianza de 100.000€

Canal de Isabel II
María Fernanda Richmond

María Fernanda Richmond, ex directora financiera del Canal de Isabel II, ha salido de prisión a las 21.00 horas tras depositar la fianza de 100.000€ que el titular del Juzgado de Instrucción nº 6 de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, había fijado para su puesta en libertad.

El mismo día que García-Castellón reducía la cuantía de la fianza de 4 millones a 100.000 euros, Richmond ha depositado la fianza y ha obtenido el visto bueno del juzgado de guardia para abandonar la prisión. La ex directiva del Canal había permanecido presa durante dos meses y medio por su implicación en la operación Lezo.

El nuevo instructor del caso tomó la decisión de rebajar la fianza en un auto emitido este viernes, tras la declaración voluntaria de ayer en sede judicial de la propia Richmond que se extendió durante dos horas y media. Tal y como avanzó OKDIARIO, García-Castellón habría recibido además el informe favorable de la Fiscalía Anticorrupción a la rebaja de fianza solicitada por la defensa de la ex directora financiera de la empresa pública del agua.

Sus explicaciones sobre su verdadero papel en el Canal de Isabel II, que se reduciría a su condición de «técnico», habrían convencido al nuevo instructor de Lezo que ha aceptado una reducción muy sustancial de la fianza.

En la vista, la defensa de Richmond había solicitado al nuevo titular del Juzgado de Instrucción nº 6 de la Audiencia Nacional una rebaja en las medidas cautelares decretadas el pasado mes de abril por su presunta implicación en la trama de corrupción y así poder “defenderse desde la libertad”. 

La ex directora financiera del Canal de Isabel II se encuentra en prisión provisional desde el pasado 20 de abril en el centro penitenciario madrileño de Soto del Real. Está acusada de presuntos delitos de organización criminal, prevaricación, falsedad documental y malversación de fondos públicos.

El objetivo de su declaración voluntaria era poder explicar sus cargos y su papel en las operaciones investigadas en el caso Lezo. Richmond aseguró ante el juez que “no cobró” ninguna comisión en la compra de la filial brasileña Emissao. Esta adquisición se efectuó en el 2013 por 21 millones de euros y apenas un año después el valor de la compañía era de poco más de 5 millones.

Richmond explicó que su posición en la empresa pública no le colocaba en situación de conocer el presunto desvío de fondos que llevó a cabo la trama liderada por el expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y que “no despachaba con él”. También que “no tenía cuentas, ni bienes en el extranjero” y que todo su dinero está embargado por el juez. Por ello, pedía que el magistrado fijara una fianza acorde a su patrimonio, algo que García-Castellón ha decretado.

El día de su primera declaración Richmond tras su detención no tuvo tiempo de reunir toda la documentación de la que disponía sobre la compra de la empresa brasileña Emissao ya que tuvo que comparecer ante el juez Velasco sólo horas después de que estallara la operación. Por este motivo, solicitaba su declaración voluntaria ante García-Castellón.

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Richmond y el hermano del ex presidente madrileño, Pablo González, son los únicos dos detenidos en la trama ‘Lezo’ que no han abonado aún la fianza impuesta por el juez Velasco para salir de la cárcel. En el caso del ex presidente madrileño y su mano derecha del Canal de Isabel II en Latinoamérica, Edmundo Rodríguez Sobrino, el magistrado decretó prisión incondicional sin fianza.

Richmond ocupó varios cargos en la empresa tecnológica Indra en Reino Unido. Posteriormente, fue la directora financiera de la filial de Indra en Argentina y después desembarcaba en el Canal, donde fue la máxima responsable financiera entre los años 2007 y 2016.

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