Cocina

Cómo hacer humo líquido para aromatizar en cocina

hacer humo liquido
Todos los pasos para hacer humo líquido

¿Cómo hacer humo líquido? El humo líquido el ingrediente que se utiliza en cocina para poder conseguir un sabor ahumado a la carne y otros alimentos, y aunque lo puedes comprar en algunos supermercados, también podemos intentar hacerlo en casa de manera fácil, siguiendo la guía de pasos para hacer humo líquido que te explicamos a continuación.

Un aromatizante artificial con un aspecto denso y con un hermoso tono negro, el humo líquido le da a cada plato un toque ahumado. Comercializado por primera vez en 1895 por EH Wright, con el nombre de humo condensado, este método alternativo de ahumar se ha convertido en un ingrediente imprescindible para los amantes de las barbacoas y aquellos que adoran de los gustos fuertes y decididos. Además, podemos hacerlo en casa tal y como te explicamos a continuación.

Pasos para hacer humo líquido

hacer humo liquido

El método para hacer esta extraña y sabrosa poción proviene de la combustión de maderas seleccionadas , cuyo humo producido a una temperatura de 300-400 ° C se condensa con agua fría, se purifica y se filtra. El resultado es el de un líquido rico en sustancias aromáticas , pero pobre de todos los residuos no deseados que se obtienen en el proceso de ahumado industrial clásico, por lo que para hacerlo en casa tendremos que usar una parrilla y madera.

  1. Para hacer tu propio humo líquido en casa debemos usar un ahumador o una parrilla de gas de las que suelen utilizarse actualmente para hacer barbacoas y también una olla con agua.
  2. El tipo de madera que use afectará el sabor de tu humo líquido, así que elige tu madera con cuidado. Las maderas de uso frecuente incluyen manzano, olivo, nogal y mezquite. Debes usar mejor virutas de alguna de esas maderas que puedes comprar fácilmente en tiendas de productos para la barbacoa.
  3. Una vez tengas las virutas de madera, úsalas para cocinar algún alimento en tu parrilla o barbacoa, sin echar líquido inflamable ya que luego vamos a usar esas virutas y no queremos contaminarlas.
  4. Recoge algunas de las virutas, antes de que se acaben de quemar del todo.
  5. Coge una funda de almohada vieja y la rellenas con las virutas que hayas recogido.
  6. Coloca una olla al fuego en la cocina y llena con bastante agua. Coloca dentro la funda de almohada con las virutas y enciende el fuego. Debes esperar a que el agua comience a hervir y entonces esperar unos 30 minutos o 45 minutos antes de retirar la funda.
  7. Pasado ese tiempo, comprobarás como el agua de la olla se ha tornado de color rojizo gracias a la virutas. Ya puedes apagar el fuego y dejas que la olla se enfríe antes de tocarla.
  8. Saca la funda con las virutas de dentro de la olla y deja que el agua comience a hervir de nuevo. Debes esperar hasta que veas como el agua rojiza se reduce en 1/3.
  9. Deja que el líquido se enfríe y entonces lo pasas a una botella o recipiente de cristal.
  10. Prueba el líquido y si notas que el sabor es demasiado amargo, añade un poco de miel o edulcorante. Mezcla bien y ¡listo!

Lo último en ¿Cómo se hace?

Últimas noticias