Cómo hacer tu propia mascarilla de arcilla casera

mascarilla de arcilla
Aprende todos los pasos para hacer una mascarilla de arcilla en casa.

No hay nada mejor que una buena mascarilla de arcilla para eliminar las impurezas, los granos y los horribles puntos negros que afean tanto el rostro. La arcilla es un elemento natural muy eficaz para limpiar la piel suavemente y es ideal para las pieles grasas. Olvídate de productos caros que no hacen más que obstruirte los poros impidiendo que tu piel respire y aprende cómo hacer tu propia mascarilla de arcilla en casa. Verás que fácil es y apenas te llevará tiempo.

¿Qué es la arcilla?

La arcilla es una roca sedimentaria, considerada un coloide, que al mezclarse con agua adquiere una plasticidad característica mientras que si se calienta a una temperatura superior a los 800ºC se endurece. En el primer caso, se usa generalmente en cosmética, concretamente en la elaboración de mascarillas, tanto faciales como corporales. La arcilla dura, se emplea principalmente en la construcción y en la industria, pero también en obras de arte e instrumentos musicales. Un dato curioso, ¿sabes que la arcilla era la antigua cerámica?

Pasos para hacer una mascarilla de arcilla

  1. Consigue arcilla cosmética para hacer la mascarilla. En el mercado hay diferentes tipos: roja, blanca, verde, negra, que tienen diferentes propiedades para los distintos tipos de piel. Normalmente se encuentran en tiendas especializadas, aunque es posible que la dispensen en alguna farmacia.
  2. Mezcla la arcilla con un poco de agua, eso sí, que sea mineral y remueve hasta conseguir una masa homogénea. No te preocupes si te queda muy suelta, siempre puedes añadir más arcilla. Igualmente, si notas que te ha quedado demasiado espesa puedes echarle un poquito más de agua.
  3. Recuerda, el recipiente debe ser de plástico, el metal puede estropear la mascarilla o hacerla menos efectiva.
  4. Añade unas gotas de aceite esencial. Si tu piel es grasa añade limón (también puedes echar aceite de árbol de te) y si es seca aceite de argán. Por otro lado, si tienes la piel normal puedes añadir aceite de almendras dulces  y aceite de rosa mosqueta para rejuvenecer la piel.
  5. Aplícate la mascarilla en el rostro. Puedes hacerlo con la mano, o si te resulta más cómodo, con un pincel y siempre en dirección ascendente.
  6. Dejar actuar durante 20 minutos, no más, de lo contrario tus poros se obstruirán.
  7. Pasado ese tiempo, debes lavar con abundante agua tibia, secar y aplicar una crema hidratante específica para tu tipo de piel.

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