‘Pesadilla en el paraíso’: Borja Estrada y Avilés protagonizan un tenso desencuentro

El pasado jueves pudimos disfrutar del Debate Final de la segunda edición de Pesadilla en el paraíso. Los exconcursantes del reality tuvieron la oportunidad de aclarar todos y cada uno de los asuntos que tenían pendientes. Dos de los protagonistas de la noche fueron, sin lugar a dudas, Borja Estrada y José Antonio Avilés.

Los dos continuaron con un conflicto que ya comenzó durante su estancia en la granja. Un asunto que tenía que ver con el piso de la madre de Borja en La Moraleja. En un momento dado, Estrada comenzó con su relato, cuando Silvina Magari hizo un comentario: “Pues allí son caros”. Acto seguido, el ganador del reality habló: “Lo han vendido por 1 millón de euros”.

José Antonio Avilés quiso enterarse de la conversación, por lo que no tardó en preguntar hasta en dos ocasiones si el piso era únicamente de su madre o también de su padre, Pipi Estrada. El concursante respondió que era de los dos. El problema fue que el ganador de Pesadilla en el paraíso terminó rectificando, aclarando que solo estaba a nombre de su madre. Una información que pidió que no se contase.

Como era de esperar, el colaborador de Sálvame hizo caso omiso a esta petición, y contó esta información en una de las galas del programa. Borja Estrada no tardó en mostrarse realmente contundente al respecto: “No digas que mi padre tiene algo que ver porque te estás equivocando”.

En el Debate Final, los dos exconcursantes continuaron discutiendo este asunto. José Antonio Avilés comenzó explicándose: “Tú me diste una información y yo la conté. No dije nada falso porque tú eres mi fuente”. El ganador del reality, con el respaldo de Carlos Sobera, fue aún más contundente: “Tu oficio es ir a comprobar la información de quién vende. Diste información falsa”.

Lejos de reconocer que había cometido un error, José Antonio Avilés continuó defendiéndose: “No hice nada que no sea lícito”. Por si fuera poco, quiso ir más allá: “Tú lo confirmaste y yo lo conté porque mi trabajo en la casa era sacar información. Era mi obligación”. Es evidente que este enfrentamiento va a seguir dando de qué hablar.