Este verano, millones de personas cruzarán el mundo a través de aeropuertos que son mucho más que infraestructuras: son la primera bienvenida a viajes y reencuentros inolvidables. Espacios modernos, cómodos y eficientes que facilitan la experiencia de cada viajero y que, gracias al trabajo del Grupo ACS, combinan tecnología, sostenibilidad y diseño para seguir siendo la gran puerta de entrada y salida de personas y mercancías.
Es posible que muchas personas que llegan al aeropuerto de San Diego, en EEUU; al de Hong Kong, en China; al de Estambul o al de Brisbane en Australia, no sepan que todos tienen el sello español del Grupo ACS.
Trabajos de ampliación y modernización de las infraestructuras aeroportuarias más importantes del mundo que están desarrollados por las filiales internacionales de la compañía, como CIMIC, Turner, Hochtief o Dragados.
Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de San Diego | Denver A&BWest Concourse | Aeropuerto Ronald Reagan
Las novedades en el sector son constantes para el Grupo. Hace unas semanas, Turner anuncio que seguía avanzando con la renovación del Aeropuerto Internacional de Memphis. Con una inversión estimada en más de 700 millones de dólares, el programa de modernización incluye la mejora de la terminal principal, reforzará la resiliencia sísmica, ampliará los sistemas de estacionamiento y proporcionará servicios renovados para satisfacer las necesidades del viajero moderno.
En el aeropuerto internacional de San Diego, uno de los más importantes de California, Turner – FlatironDragados han llevado cabo una importante ampliación del espacio con la construcción de la Terminal 1 con una dotación de 30 puertas de embarque y una gran diversidad de servicios públicos. Los pasajeros tendrán más asientos a su disposición, así como más restaurantes y tiendas, y puntos de seguridad con más filas.
Asimismo, también tendrá un sistema subterráneo de suministro de combustible para reducir la necesidad de que los camiones tengan que cargar combustible a las aeronaves.
5.000 plazas de aparcamiento con sistemas digitalizados
Tres carriles de acceso para reducir la congestión del tráfico
Se espera que este nuevo espacio comience a operar a finales del verano de 2025, con la apertura de 19 puertas, aunque los trabajos concluirán en 2028, incluido el programa planificado para reducir el ruido y no molestar a los residentes de la zona.
Este es el proyecto de infraestructura más grande en la historia del Aeropuerto Internacional de San Diego.
En el Aeropuerto Ronald Reagan de Washington, Turner llevó a cabo una actualización de la terminal B/C, la cual ha aumentado considerablemente el número de pasajeros, de los 15 millones a los 24 millones anuales.
Entre otras cosas, desarrolló un edificio de conexión de dos niveles con espacio de circulación para los pasajeros, pasarelas móviles y estaciones de carga para coches eléctricos, todo ello conectado a un vestíbulo de tres niveles con 14 puertas de embarque.
Sin salir de EEUU, otro proyecto emblemático es el trabajo de la Terminal C en el Aeropuerto Internacional de Orlando, en Florida. Este espacio es uno de los más punteros del mundo, tanto para vuelos nacionales como internacionales, debido a los trabajos de modernización de Turner.
No sólo tiene 15 puertas de embarque y espacio para 20 aeronaves, también tiene instalaciones multimedia que dan la bienvenida alrededor de 12 millones de pasajeros anuales, que tienen a su servicio, además, tecnología de última generación para equipaje y seguridad.
Otra de las compañías del Grupo ACS en EE.UU. es FlatironDragados. Además del proyecto conjunto desarrollado con Turner en el aeropuerto de San Diego, citado anteriormente, FlatironDragados también ha desarrollado junto a ACS Infra, mostrando las sinergias entre las diferentes firmas del grupo español, planes icónicos como el LAX Automated People Mover, un tren automático que impulsa la conexión entre las terminales del Aeropuerto de Los Ángeles, siendo una de las claves más importantes dentro de este proyecto de modernización.
Se trata, en concreto, de un tren con un sistema automatizado –sin conductor– de transporte de personas que cuenta con una longitud de 3,6 kilómetros y un total de seis estaciones, conectando terminales, aparcamientos, una nueva estación de metro y, además, un espacio de alquiler de vehículos.
Otra filial con gran peso en el Grupo ACS es Hochtief, una de las principales constructoras de infraestructuras aeroportuarias a nivel mundial, con una trayectoria que abarca desde la ejecución de terminales hasta la gestión integral de los principales aeropuertos de Europa.
En Atenas, el proyecto del Aeropuerto Internacional Eleftherios Venizelos fue liderado por Hochtief, que puso en marcha un plan moderno y 100% adaptable al crecimiento del tráfico aéreo futuro, gracias a la proyección de una construcción modular que evita obras de gran envergadura.
La compañía alemana ha conseguido dejar su huella en varios puntos del continente europeo. En Polonia, HOCHTIEF ya amplió el aeropuerto de Varsovia en 1990. En aquel entonces, como contratista general, tuvo que ser capaz de organizar la financiación privada antes de la ampliación. Desde entonces, ha recibido varios encargos para ampliar el aeropuerto de la capital polaca. Por ejemplo, de 2012 a 2015 con la ampliación de la Zona 1 de la Terminal A. Por ello, el proyecto fue galardonado con el Premio a la Construcción del Año de la Asociación Polaca de Ingenieros y Técnicos (PziTB) en 2015.
Fuera de Europa, uno de los grandes proyectos más legendarios de HOCHTIEF: el aeropuerto hub de Jeddah (Arabia Saudí). El recinto tiene 105 kilómetros cuadrados y el núcleo de la instalación está formado por cuatro terminales. Una de ellas es la terminal de Peregrinos. Su fascinante cubierta de pabellón es el mayor espacio cubierto del mundo y ya ha dado sombra a millones de peregrinos a La Meca. La construcción llave en mano del aeropuerto fue también en su momento el mayor encargo que se había adjudicado nunca a una sola empresa constructora.
Y en Budapest, una de las ciudades más visitadas de Europa, recibe a los pasajeros en el Budapest Ferenc Liszt International Airport. La compañía del grupo español llevó a cabo una ampliación a través de un ambicioso plan de renovación, donde se incluyó la construcción un moderno edificio que unió las dos terminales existentes y mejoró la experiencia del pasajero. Además, también consiguió elevar la operatividad del aeropuerto gracias a mejoras en la seguridad y el servicio al usuario, lo que le ha convertido en un espacio clave de Europa Central. Por este aeropuerto pasaron 17,5 millones pasajeros en 2024, casi un 20% más que un año antes, lo que marca un récord histórico para Budapest.
En España, por su parte, destaca el proyecto de ampliación del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, con la construcción de la T4 de la capital, un espacio que ya se ha convertido en un símbolo de las infraestructuras aeroportuarias internacionales.
Dragados llevó a cabo la construcción de la T4 de Madrid –inaugurada en 2006–, una de las más modernas y de mayor capacidad de Europa, compuesta por dos edificios: la T4 principal y la T4 Satélite, ambas terminales se comunican entre ambas por un tren automático subterráneo. En conjunto, esta terinal puede gestionar hasta 50 millones de pasajeros al año en condiciones óptimas de operación, y se estima que entre el 60% y 70% del tráfico total del aeropuerto.
Esta emblemática infraestructura diseñada por el arquitecto Richard Rogers y el Estudio Lamela, cuenta con una superficie de 470.000 metros cuadrados. Dragados participó en la ejecución del edificio principal desarrollando parte del edificio satélite T4S, así como en la construcción de pistas de aterrizaje y plataformas asociadas. Y, además, ejecutó grandes obras de movimiento de tierras, cimentaciones, estructuras y acabados interiores, y sistemas técnicos de última generación.
Las obras no sólo han supuesto un diseño de vanguardia, en la línea estética que siguen los aeropuertos internacionales, sino también un desafío al ser una de las mayores obras civiles del viejo continente. Un proyecto que ha dotado a la terminal de una mayor capacidad operativa, eficiencia y sostenibilidad, y una dinamización real de transporte de pasajeros y equipajes.
La obra fue considerada un modelo de ingeniería, coordinación logística y arquitectura moderna, y posicionó a Dragados como uno de los líderes mundiales en infraestructuras aeroportuarias.
Saltando a Australia, la filial CIMIC es la gran protagonista de diferentes proyectos en el país, destacando las obras de mejora y ampliación del Aeropuerto de Western Sydney.
Los trabajos de CIMIC en Sydney incluyen el movimiento de 25 millones de m3 de tierra, la construcción de una pista de 3,7 kilómetros, así como calles de rodaje, plataformas de estacionamiento y drenaje, infraestructuras de seguridad y balizamiento aeroportuario, así como el trabajo de conexiones con las futuras terminales y áreas logística.
Las obras de CIMIC están en marcha y, previsiblemente, estarán listas en 2026, dotando al aeropuerto de más eficiencia y una capacidad para recibir a alrededor de 10 millones de pasajeros al año. Además, a través de CPB Contractors, también la filial del Grupo ACS desarrolla la nueva línea de metro que conecta el centro de la ciudad de Sydney, la más poblada de Australia, con el aeropuerto. Concretamente, la estación de St Marys llegará hasta el aeropuerto internacional de Western Sydney, gracias al servicio de transporte público desarrollado por CIMIC.
En el Aeropuerto de Brisbane, por su parte, los trabajos de CIMIC permiten un aumento de los aterrizajes y los despegues de alrededor de 227.000 vuelos anuales a 360.000 en 2035, y hasta medio millón en 2045.
Los trabajos consistieron en una nueva pista de 3.300 metros de largo, junto a un amplio sistema de calles de rodaje, iluminación y sistemas de navegación aérea. Pero, además, también ha hecho obras de mejora en la seguridad del aeropuerto y el comercio minorista del mismo, contribuyendo en ambos casos a una mejor experiencia de usuarios nacionales e internacionales.
Por último, destacar en Asia los trabajos de CIMIC –a través de su filial Leighton Asia– en el Aeropuerto Internacional de Hong Kong, donde la compañía construye la nueva Terminal 1 –Annex Building– con una extensión de siete pisos gracias a una nueva infraestructura de hormigón y techo de acero, y hace una ampliación de un parking, cintas de equipaje y nuevos espacios comerciales.
En estas obras de la T1 se incluyen nuevas puertas de embarque, zonas de espera y puntos de control de seguridad; adecuando las instalaciones al crecimiento previsto para uno de los hub de aviación más transitados del mundo.
En resumen, el Grupo ACS es un referente global en infraestructuras aeroportuarias con capacidad de aportar experiencia, innovación y una visión a largo plazo.
Texto
María Villardón
Diseño
OKDIARIO