75 aniversario de la EMT de Madrid

Transportando

Historias

Fue un noviembre de 1947 cuando la Empresa Municipal de Transportes (EMT) comenzó da dar a los madrileños los primeros servicios de transporte público. 75 años han transcurrido desde entonces.

Más de siete décadas lleva conectando Madrid de extremo a extremo

y guardando con secreto nuestros sueños, las divertidas escuchas de conversaciones ajenas, nuestras primeras caricias de manos entre amores tempranos o tardíos, las visitas de esos padres a esos hijos que han venido a Madrid a prosperar, los encargos de las modistillas de las grandes casas de moda que volaban del centro al Barrio de Salamanca, los nervios de un primer trabajo o las lágrimas amargas de una decepción.

Guardianes de historias cotidianas

Todas esas historias cotidianas siempre han estado en movimiento, sobre cuatro ruedas, impulsadas por los tranvías y los modelos Pegaso más modernos en la década de los años 60 y 70, volando gracias a las nuevas fuentes de energía pioneras como el gas natural, el hidrógeno o la electricidad. Anécdotas que viajan de día y también de noche, relatos de diversión y recados rápidos que ahora también recorren las fabulosas calles de Madrid sobre dos ruedas.

Y es que la EMT lleva 75 años de jovial movimiento y apostando de manera firme por la innovación, por las emisiones cero y por una ciudad hiperconectada gracias a las más vanguardistas tecnologías, nuevas soluciones de movilidad sostenible y ciudadanos que miran al futuro encantados de cuidar esta casa urbanita y muy europea que jamás duerme.

Adiós,

Tranvía

1972, el adiós al último tranvía

Sí, Madrid se movía en tranvía desde finales del S. XIX. Un medio de transporte muy popular en la capital donde cada día subían cientos de madrileños, gatos y no gatos, para llegar a sus trabajos, al cine o las tertulias de los adorados cafés. Sus catenarias no eran desconocidas para los emblemáticos iconos madrileños, los silbidos al pasar y el tintineo del timbre eran la banda sonora de un Madrid lleno de luz.

Durante un siglo, y hasta el día de su último viaje, el tranvía también estuvo en constante transformación:

primero fue tirado por caballos, más tarde funcionó con vapor, subiéndose a lomos de la Revolución Industrial, y, por último, el impulso se lo brindó la electricidad.

Fue a finales de los años 60 cuando el tranvía fue dejando paso de forma progresiva a los nuevos autobuses Pegaso, los más modernos del momento. Presente en el cine español y en el corazón de millones de madrileños, hizo su último viaje en 1972, el mismo año en el que celebraba sus 101 años. Para la despedida, la EMT organizó un viaje conmemorativo desde las cocheras de Fuencarral hasta Cuatro Caminos a través de Bravo Murillo.

Así relató el final del tranvía el cronista Agustín Burgaleta: “Hoy a las dos y dieciséis de la madrugada se encerraba en la Estación de Fuencarral el último tranvía que circuló por Madrid lleno de amigos de este transporte acompañando a la dirección de la Empresa Municipal de Transportes (EMT)”.

Madrid

Multicolor

Del blanco y negro al multicolor

Los autobuses de la EMT no sólo han evolucionado por un sendero cada día más verde ya desde finales de los años 90, cuando se estrenó aquel vehículo que se movía con gas natural, también han salpicado de color las calles de Madrid. Según el color, los pasajeros diferenciaban si tenían que entrar por delante o por detrás, dependiendo de si había o no cobradores: rojos o azules.

Pero, vayámonos un poco antes. Dejando atrás al pionero tranvía, la primera compra de autobuses que hizo la EMT para contribuir al transporte colectivo en Madrid en tiempos de postguerra fue el modelo Leyland de dos pisos en colores azules y blancos. Eran de fabricación inglesa, ya que aún España no tenía capacidad industrial automovilística.

Los divertidos dos pisos fueron sustituidos por los articulados en 1966, el crecimiento demográfico de Madrid era tan alto, que la EMT tuvo que buscar alternativas para la fuerte demanda de transporte público. Así es como los Pegaso 6035A son ya parte de la historia de Madrid.

También recorrían el centro de Madrid unos microbuses en color amarillo. ¡El mismo bus que en 1974 comenzó a conectar la Plaza de Colón con el aeropuerto de Barajas! Una línea 89 que fue el germen del bus express directo a las cuatro terminales.

Años 70: madrugadores y noctámbulos… empezaron a tener cómo regresar a casa

A mediados de los años 70, que parece que fue cuando se comenzó a respirar revolución y transgresión musical, cultural y social, muchos madrileños no tenían cómo regresar a casa tras una noche de diversión. También estaban los madrugadores que tenían que acudir a sus puestos de trabajo.

Sea como fuere, vinieran de una parte u otra, todos necesitaban un medio de transporte.

Por eso, la EMT inauguró la primera red de autobuses nocturnos, un novedoso y pionero servicio que conectaba el centro con los barrios más lejanos.

De este modo, los conocidos búhos acercaron la periferia a los cines, las salas de fiesta y el mundo más cultural de Madrid, a la que vez que contribuían a crear un plan de movilidad urbana inclusivo y ambicioso en servicios. En aquel entonces, cada trayecto en búho costaba 15 de las antiguas pesetas.

Ciudad

Hiperconectada

Madrid, siempre conectada, siempre compartiendo

Madrid está siempre conectada y siempre está compartiendo gracias a las 219 líneas que conforman la red de la EMT y los cinco centros de operaciones –conocidos más comúnmente como cocheras– distribuidos por una capital abrazada por la innovación.

Una de las más conocidas es la cochera de La Elipa y lo es por varias razones.

Allí, en un improvisado helipuerto, aterrizó el avión del Papa Juan Pablo II durante su primer viaje a España en 1982 para acudir a una cita que tenía en el cementerio de la Almudena. Pero es que, además, este Centro de Operaciones tendrá una súper base con capacidad para 318 autobuses, 20 de ellos articulados, y el 100% de los mismos serán cero emisiones.

Con un presupuesto de 115 millones de euros, en la misma parcela se conformará una cubierta fotocatalítica de 34.000 m2 con efecto descontaminante de descomposición de óxidos de nitrógeno (NOx) y se levantará una construcción sostenible con fachada vegetal permeable totalmente integrada con el entorno.

Por su parte, la cochera de Entrevías nacida en 1979 se convertirá en un punto estratégico para una ciudad más sostenible. La EMT construirá una innovadora planta de repostaje de hidrógeno ‘verde’ que tendrá, además, una planta fotovoltaica para la generación de electricidad a partir de fuentes renovables.

EMT

Electrificación

Sostenibilidad, innovación y servicio

El futuro de la planificación de la movilidad sostenible en las ciudades pasa por la innovación, las nuevas tecnologías y fuentes de energía. Ingredientes fundamentales para que Madrid esté cada día más cerca de las cero emisiones y de una economía descarbonizada.

En este sentido, la EMT lleva décadas trabajando por una ambiciosa transición energética y apostando por la renovación de sus flotas por autobuses cero emisiones con su Plan Estratégico 2021 – 2025.

En éste se contempla una apuesta absoluta por la movilidad sostenible de la ciudad de Madrid. En enero de 2023 ya no habrá ningún autobús diésel en sus flotas, también se comenzarán a adquirir los primeros autobuses de hidrógeno verde y se electrificará la cochera de Carabanchel.

Mientras que en 2025, en apenas un plazo de tres años, se espera que el 25% de la flota sea eléctrica, que la cochera de La Elipa funcione a pleno rendimiento y haber llevado proyectos de plantas fotovoltaicas a todos los centros de operaciones.

Canalejas 360, un icono de la electrificación

Otro agente imprescindible en las ciudades más modernas son los hubs de movilidad eléctrica, espacios hiperconectados y accesibles que ofrecen a los ciudadanos diferentes formas de viajar de manera limpia por la ciudad. Esto en Madrid es ya una realidad:

Canalejas 360. Alberga la electrolinera más potente de España en pleno centro de Madrid con 12 puntos de recarga y una potencia instalada de 2,5 MW.

Cuatro de estos puntos son de recarga ultrarrápida de última generación con una potencia máxima de 400 KW, otros cuatro puntos de recarga ultrarrápida de 200 KW, y otros cuatro de 50 KW. Así, los madrileños pueden llegar a la Puerta del Sol con su coche eléctrico, propios o compartidos, recargar la batería y, además, también recoger paquetes.

Concept Bus

Llevados por la innovación, uno de los ejes de su estrategia, la EMT ha lanzado un concurso de ideas para diseñar el autobús del futuro en la ciudad de Madrid a través del proyecto ‘Concept Bus’.

Esta iniciativa incluye la asistencia técnica y la consultoría dentro del proceso de fabricación de un prototipo a escala real que llevará a las calles de Madrid las ideas más innovadoras de los mejores diseñadores con el fin de fomentar el atractivo del transporte público y rediseñar la experiencia de cliente.

De este modo, además, la EMT podrá incorporar las mejores ideas de funcionalidad y de diseño en sus próximas licitaciones de autobuses a partir de 2024.

Hola,

Bicimad

En un pispás con BiciMad

Ahora, además, volamos en BiciMad, vamos dándole a los pedales de las bicicletas eléctricas de la EMT. Porque somos madrileños, somos europeos, somos del mundo que se mueve por el medio ambiente. Si desde el Palacio de Correos miras hacia la Gran Vía el panorama ha cambiado, si hubiéramos podido ver con ojos de los años 40 desde el mismo lugar habríamos considerado que teníamos ante nuestros ojos un panorama demasiado futurista para ser real.

¿Bicicletas eléctricas para movernos por Madrid? ¿Y compartidas? Así es, es el presente de nuestra nueva movilidad. Una flota de 3.000 bicicletas con 258 estaciones repartidas por 15 distritos de la capital permite que acudamos puntuales a nuestras citas, sean las que sean llegamos en un pispás.

Las bicicletas se han convertido en una de las estrellas de la movilidad urbana de Madrid.

En 2023, BiciMad llegará a todos los distritos de Madrid.

Se alcanzarán las 611 estaciones y 7.500 nuevas bicicletas. Es decir, el doble de las actuales, y estará presente en zonas de la ciudad más alejadas del centro como la Villa de Vallecas, Barajas, Hortaleza, Villaverde o Canillejas.