Sánchez quiere subir ya los impuestos madrileños para acabar con la «asimetría» frente a Cataluña

Pedro Sánchez
Pedro Sánchez en Moncloa
Carlos Cuesta

Las presiones recaudatorias crecen a medida que los anuncios de gasto se agolpan en La Moncloa. Y Pedro Sánchez ha dado ya orden de que se solvente ese cuadre de cifras acelerando la subida obligatoria de los impuestos para las comunidades gobernadas por el PP y, en especial, para Madrid. El presidente quiere que se obligue a los territorios del PP a asumir un tipo mínimo obligatorio en los Impuestos de Sucesiones, Donaciones y Patrimonio. Y que se fuerce una subida también en el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados en caso de que se observe un potencial recaudador mayor en estas regiones.

Todo ello con el único fin económico de empezar a parchear una recaudación que no termina de cumplir con los planes socialistas y con el fin político de golpear a las regiones que pueden mostrar una alternativa al modelo de saqueo fiscal que prepara el PSOE.

Sánchez tiene ya encima de la mesa buena parte de sus promesas de gasto. Tiene que demostrar que es capaz de cumplir tanto a sus propios votantes como a los de Podemos. Gastos en becas, Sanidad, Educación, pensiones, etc. Y eso supone más déficit si no se encuentran partidas de ingreso que lo compensen. Y, para colmo, Bruselas no ve con buenos ojos lo que obviamente supone un descontrol del déficit español y de las promesas de control del derroche público.

El presidente del Gobierno cree que ha encontrado la pócima mágica y prepara por ello ya su artillería fiscal: una subida de impuestos nacionales generalizada para todos los españoles de un mínimo de 1.000 euros por contribuyente y año. Pero ese cálculo sólo incluye el impacto de los hachazos sobre los impuestos nacionales: IRPF, Impuesto de Sociedades, Impuestos Especiales y los nuevos tributos que recogen los socialistas en su programa fiscal.

Pero Sánchez quiere más. Por eso pretende disparar esa cifra al sumar los hachazos fiscales que preparan para los impuestos autonómicos: ahí pretenden quitar libertad a las comunidades autónomas y hacer que el golpe llegue hasta los 3.000 euros por contribuyente y año en el caso, por ejemplo, de la Comunidad de Madrid.

El plan socialista para los impuestos autonómicos pasa por impedir el alto grado de rebajas de impuestos que han practicado algunas de las comunidades del PP. Y como máximo exponente la Comunidad de Madrid. Sánchez quiere impedir la actual potestad que permite llevar casi hasta cero impuestos como Sucesiones, Donaciones y Patrimonio.

Eso supone un fuerte golpe teledirigido a la forma de hacer política de los populares. El PSOE lo vende como una “armonización fiscal”. Como el fin de las “asimetrías”. Pero lo cierto es que es un mecanismos para sacar recursos de las comunidades gobernadas por el PP para enviarlos a otras. Por ejemplo, Cataluña, donde las promesas de Pedro Sánchez necesitan encontrar una vía de financiación.

Si se produjera esa supuesta armonización fiscal, tal y como está planteando el Gobierno en funciones de Pedro Sánchez, se traduciría para las regiones con menores impuestos, y en concreto para los madrileños en una subida masiva de impuestos. En total, los contribuyentes de la Comunidad de Madrid tendrían que hacer frente a una subida fiscal de 5.900 millones de euros anuales si se igualase, por ejemplo, a la fiscalidad de Asturias, donde ha gobernado tradicionalmente el PSOE.

Esto afectaría prácticamente a todos los impuestos de competencia autonómica, como el tramo cedido a las autonomías en el IRPF, el Impuesto de Patrimonio, el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, y el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITPAJD).

Hay que recordar que los partidos separatistas -como ERC o JxCAT- han pedido ya esta subida en Madrid. Y es que su delirio nacionalista ha provocado ya una fuga de empresas y patrimonios que ha encontrado cobijo en la comunidad gobernada por Isabel Díaz Ayuso. Y, según sus planteamientos, quitando atractivo a Madrid al menos parte de esa fuga se frenaría.

Lo último en España

Últimas noticias