Sánchez se niega a revelar el coste de los Consejos de Ministros en Sevilla y Barcelona

El Gobierno de Pedro Sánchez ha evitado detallar a cuánto ascendió la organización de los Consejos de Ministros celebrados en Sevilla y Barcelona el pasado año. En diversas respuestas parlamentarias escritas tanto al diputado del PP Carlos Floriano como al portavoz del PDeCat en el Congreso, Carles Campuzano, el Ejecutivo ha rechazado ofrecer cifra alguna de estos desplazamientos.

En concreto, sobre el Consejo de Ministro en Sevilla, Moncloa se limita a señalar que el coste es «materia clasificada». Y respecto al de Barcelona, lo enmarca en el compromiso que adquirió el jefe del Ejecutivo. «Tal y como declaró el Presidente del Gobierno en la Sesión Plenaria número 163 del Congreso de los Diputados, celebrada el pasado día 12 de diciembre de 2018: ‘[…] Mi voluntad es acercar el Gobierno de todos a todos y cada uno de los territorios de España, reconocer con su presencia nuestra estima por la diversidad territorial del país’», recoge la contestación del Gobierno.

En una pregunta dirigida al Portal de  Transparencia, el Ejecutivo ya recurrió a la Ley de Secretos Oficiales para sostener que no podía «desglosar» los gastos que supuso el Consejo de Ministros celebrado en Sevilla el pasado 26 de octubre.

El presidente se trasladó de La Moncloa a la base de Torrejón de Ardoz en helicóptero y después tomó el Falcon hacia la capital hispalense. Los ministros, por su parte, emplearon un Airbus A310. Finalizado el Consejo, regresaron a Madrid. Fuentes de La Moncloa justificaron el empleo de estos medios por motivos de seguridad.

En cuanto al Consejo de Ministros que tuvo lugar el 21 de diciembre  en la Casa Llotja de Mar (Barcelona), el despliegue fue uno de los más amplios que se recuerdan en décadas. Ya no sólo por el empleo de aeronaves de la Fuerza Aérea Española sino también por el fuerte dispositivo de seguridad que blindó la reunión frente a los grupos violentos del separatismo.

Otros dos helicópteros

Así, Pedro Sánchez volvió a utilizar el Falcon para volar hasta la Ciudad Condal en la víspera del Consejo de Ministros, mientras que la mayor parte de los ministros aterrizaron el mismo día 21 en Barcelona a bordo de un Airbus procedente de Madrid. Además, fueron movilizados dos helicópteros Super Puma por si era necesario evacuar del lugar de Casa Llotja de Mar a la comitiva del Consejo de Ministros ante un eventual asalto de los CDR.

A ello hay que unir de que los 9.000 policías que conformaron el dispositivo de seguridad, en torno a un millar se trató de agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, cuyo presupuesto corresponde al Ministerio del Interior. Los otros 8.000 fueron Mossos d’Esquadra, gestionados por la Generalitat de Cataluña.