España

Pedro Sánchez, de la cola del paro a Presidente de Gobierno

Pedro Sánchez ha sobrevivido a golpes políticos que tumbaron a más de uno. Derrotado en las últimas dos elecciones y posteriormente expulsado del liderazgo de su partido, Sánchez descendió a los infiernos de la vida política, llegando a la cola del paro, para resurgir entrando por la puerta grande. Ahora, el que fue abanderado del famoso «no es no», llega a la Moncloa tras lograr los apoyos necesarios a la moción de censura que presentó al ya ex presidente Mariano Rajoy.

Este ex profesor de economía de 46 años vio cómo su obstinación daba fruto cuando Rajoy anunciaba que no iba a dimitir, facilitando de manera casi automática la elección de Sánchez como el próximo líder del Gobierno español. «Su soledad, señor Rajoy, constituye el epitafio de un tiempo político, el suyo, que ya se ha terminado», lanzó Sánchez el jueves en el Congreso de los Diputados.

Pese a que hizo frente común con Rajoy en los últimos meses frente a la tentativa independentista en Cataluña, Sánchez será recordado por el PP por lograr la caída de un jefe de gobierno que había sobrevivido a numerosas crisis.

Sánchez «pasará a la historia de España como el judas de la política», lanzó recientemente Fernando Martínez-Maillo, número tres de la formación conservadora. Rajoy le reprochó el jueves en el Congreso de los Diputados llevar a cabo «un ejercicio de oportunismo al servicio de una ambición personal».

Pedro Sánchez, defenestrado y rescatado

Nacido el 29 de febrero de 1972 en Madrid, creció en una familia acomodada, de padre empresario y madre funcionaria. Al tiempo que le dedicaba muchas horas al baloncesto (mide 1,90 m) estudió Económicas, primero en su ciudad y luego en Bruselas.

Amante de la política desde joven, según sus compañeros de clase, fue concejal municipal en Madrid de 2004 a 2009, cuando se convirtió en diputado y su carrera despegó.

Propulsado en 2014 a la cabeza de un PSOE debilitado gracias a las primeras primarias del partido, llegó por detrás de Rajoy en las elecciones de diciembre de 2015. Intentó formar gobierno con los partidos emergentes de Podemos y Ciudadanos, pero la iniciativa se vino a pique.

En la repetición de elecciones en junio de 2016, el PSOE registró su peor resultado desde el restablecimiento de la democracia española en 1977. Sánchez fue defenestrado por una rebelión interna de su partido, que lo culpaba de los malos resultados en las urnas. Pero volvió por la puerta grande en mayo de 2017, cuando los militantes lo devolvieron a la cabeza del partido.