Crisis del coronavirus

La pandemia tampoco saca a Sánchez de La Mareta: la presión en las UCI se duplica en un mes

Pedro Sánchez pandemia
Un sanitario atiende a un paciente de Covid ingresado en la UCI.
Luz Sela
  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

Con la incidencia de coronavirus a la baja en España (398,94 casos por cada 100.000 habitantes), lo que sigue preocupando ahora es la presión en los hospitales. La tasa de ocupación, especialmente en las Unidades de Cuidados Intensivos, lleva semanas siendo elevada. Este martes, según el último balance del Ministerio de Sanidad, se sitúa en el 20,71% de camas ocupadas por los pacientes más graves, 1.907 en todo el país. Hace apenas un mes, la ocupación era del 9,59%. En las pasadas dos semanas se ha registrado un total de 189.300 positivos. Además, en el informe de este martes se han añadido 144 nuevos fallecimientos, en comparación con 102 el martes pasado.

Pese al avance de la vacunación, la pandemia se sigue haciendo notar en los hospitales, lo que evidencia que la crisis sanitaria está aún lejos de remitir por mucho que el Gobierno traslade optimismo. El Ejecutivo ha fiado ya toda su gestión del Covid a la cobertura de españoles vacunados. Sánchez fijó en el 70% la llamada ‘inmunidad de rebaño’, pero ese porcentaje -ante el avance de la variante Delta- se ha demostrado totalmente insuficiente. 

Aunque la presión hospitalaria se ha relajado levemente en los últimos días, sigue siendo muy elevada. 9.191 personas están aún ingresadas en los hospitales españoles.

Sánchez se ha mantenido impasible en sus vacaciones mientras las cifras revelaban la verdadera cara de la pandemia.

El Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC), España está en cabeza de la tasa de muertes por Covid en los últimos 14 días, según el último dato registrado por este organismo europeo. De hecho, llega a triplicar la media de la UE. 

El dato corresponde a la semana del 2 al 8 de agosto, y sitúa esa tasa en el en los 18,11 decesos por cada millón de habitantes mientras que la media europea está en 6,26.

España es el segundo país peor situado en esta estadística, sólo por detrás de Chipre (disparado con una tasa de 42,79 muertes). Portugal, que en semanas anteriores había estado en peor posición que España, queda desplazado ahora al tercer puesto, con 17,87 fallecimientos. La nefasta posición española está muy por encima de otros países como Francia (9), Italia (4,54) o Alemania (3,09). El mapa europeo es suficiente para sacar los colores a Sánchez.

El aumento en la propagación del virus y el impacto en los hospitales se debe fundamentalmente a la alta penetración de la variante Delta, ya dominante en España.

El último informe de Sanidad sobre la evolución de las cepas admite que esta variante, más contagiosa, supone ya el 85% de los contagios. En junio, el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, aseguró que esta mutación no tenía un «espacio importante», minusvalorando así su potencial de propagación.

Pese a las críticas de la oposición, Sánchez no ha interrumpido sus vacaciones de verano, que disfruta en el Palacio de La Mareta (Lanzarote).

El presidente socialista sólo ha acudido a un acto público estos días, un homenaje al Nobel José Saramago en la isla. Allí, Sánchez aprovechó para sacar pecho por los datos de vacunación y los económicos.

En este sentido, destacó que el 60 por ciento de la población contase ya con la pauta completa de vacunación, agradeciendo a la ministra de Sanidad, Carolina Darias, presente en el acto, y a las comunidades autónomas el esfuerzo, y celebró que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) haya autorizado el ensayo clínico de la vacuna fabricada por Hipra, el primero de una vacuna desarrollada en España.

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