Carmena se lava las manos y no protege a los agentes de parquímetros de las agresiones de usuarios

Los agentes de movilidad del SER (Servicio de Estacionamiento Regulado) de Madrid llevan esperando más de cuatro meses una respuesta del Ayuntamiento de Manuela Carmena ante el incremento de agresiones a los trabajadores del sector.

El pasado 9 de septiembre, los agentes del SER enviaron un requerimiento al Ayuntamiento de Madrid en el que solicitaban una reunión en les que les iban a requerir hasta seis cosas, desde un protocolo de actuación ante las agresiones sufridas por los controladores SER, hasta un spray de defensa personal autorizado.

Desde CSIF, sindicato mayoritario del sector, explican que “estamos esperando a ser atendidos por Manuela Carmena, a la que en septiembre escribimos a través de Ines Sabanés, que en un primer momento nos atendió y se comprometió con nosotros a tener reuniones esporádicas para tratar cualquier problema en nuestro colectivo. Pero seguimos sin respuesta del Ayuntamiento”.

“Estamos muy molestos con Carmena. Inés Sabanés, que es la encargada del Ayuntamiento sobre esta área, no está haciendo efectivo sus compromisos. Nos dijo en octubre que tendríamos reuniones periódicas, y aquí seguimos esperando”, explican otras fuentes en el mismo sentido.

Desde CSIF explican que el problema va más allá de las agresiones, motivo de la urgencia de la reunión con el Ayuntamiento: “Había un compromiso electoral por parte de Manuela Carmena de reubicar a estar personas en distintos servicios municipales. Sin embargo, cada vez se está informatizando todo más. Ahora hay motos y coches que toman las matrículas de manera automática, que están en periodo de pruebas. El problema, además de las agresiones, es que va sobrando gente, y se están produciendo despidos”.

El hartazgo de los trabajadores SER es palpable, y muy comprensible. Pese a que los PDAs de los controladores cuentan con un botón “antipánico” –una suerte de alarma que da aviso de la agresión-, las agresiones han pasado de no existir en 2013, a ser más que habituales todos los años.

Por el momento, las empresas que dan servicio a los empleados del SER se han negado en rotundo a proporcionar un spray de defensa personal, alegando que “no lo harán a no ser que tengan la recomendación expresa del Ayuntamiento de Madrid”.