La larga espera que tiene el Rey hasta la formación de Gobierno

El proceso institucional de constitución de las dos Cámaras legislativas  -Congreso y Senado- previsto para el próximo martes, día 21, marcará el inicio de un tiempo que se prevé largo y dificultoso dada la fragmentación de las fuerzas políticas que han obtenido escaños en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo. El Rey Felipe VI deberá demostrar una vez más, en su aún corto reinado que está a punto de cumplir su quinto aniversario, que está preparado para ejercer ese escueto papel de moderador y árbitro de la situación política que le atribuye la Carta Magna en situaciones delicadas y complicadas de manejar.

Su primera cita después de la elección del nuevo Presidente o Presidenta del Congreso de los Diputados y de los integrantes de la Mesa de la Cámara, será con ese integrante de las altas autoridades del Estado que acudirá al Palacio de la Zarzuela para cumplir con el protocolo de notificar al Jefe del Estado que el o ella ha sido votado mayoritariamente por los diputados elegidos en la última consulta electoral. Después de ese trámite y según han comunicado los propios partidos, se abrirá un compás de espera hasta después de las elecciones municipales, autonómicas y europeas previstas para el domingo 26 de Mayo. Eso hace pensar que no será hasta la primera semana de Junio cuando los dirigentes políticos de las distintas fuerzas presentes en el Congreso se pongan a hablar entre ellos hasta conseguir acuerdos que permitan intentar la investidura de un Presidente del Gobierno.

A partir de ese momento será cuando el Presidente de las Cortes acuda al Palacio de la Zarzuela para comunicar al monarca que todo está ya listo para comenzar las consultas previas del Rey con los dirigentes de los partidos que han aceptado acudir a despachar con el monarca. Ese hecho marcará el momento en que Felipe VI sondeará las posturas de cada uno de ellos para saber que candidato puede alcanzar una mayoría suficiente para poder tener los votos necesarios que le permitan gobernar. Cuando eso ocurra, el aspirante a liderar el nuevo Ejecutivo recibirá el encargo formal del Rey de celebrar la sesión de investidura.

El proceso culminará con la solemne apertura de una nueva legislatura que será presidida en el Congreso por el Jefe del Estado, seguida días más tarde por la jura de los ministros que formarán parte del equipo ante don Felipe en el Salón de Audiencias del Palacio de la Zarzuela. Dada la fragmentación de las fuerzas políticas, como se ha señalado antes en este texto, se prevé que el proceso sea largo y que no culminará hasta bien entrado el mes de Junio en el mejor de los casos.