Memoria Histórica

Almeida gana la batalla a un asesor de Moncloa por retirar a los chequistas del memorial de la Almudena

José Luis Martínez-Almeida
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida. (EFE)

El Tribunal de Cuentas ha archivado la denuncia que presentó la Asociación Memorialista Ranz Orosas, liderada por un asesor del Gobierno de España y una dirigente del PSOE, contra el Ayuntamiento de Madrid por retirar las placas del memorial del cementerio de la Almudena que proyectó Manuela Carmena. El alcalde José Luis Martínez-Almeida decidió, junto a su equipo, eliminar todos los nombres para, apostando por la concordia, evitar incluir a unas víctimas sí y a otras no.

Según avanzan fuentes oficiales de este Tribunal a OKDIARIO, los magistrados de la Sala de Enjuiciamiento han decidido dar carpetazo a este asunto que colea desde hace más de un año. No aprecian delito de prevaricación como denunciaban la asociación AMRO, cuya presidenta es Macarena Orosa, concejal del PSOE en Coslada, y cuya defensa legal corre a cargo del abogado Eduardo Ranz, actualmente asesor del Gobierno central, adscrito al Ministerio de Justicia.

La denuncia se presentó el pasado 26 de noviembre de 2019. La citada asociación memorialista denunciaba la retirada de las placas con los nombres de las víctimas del franquismo de este monumento de 520.000 euros en el cementerio de la Almudena de Madrid. Aseguraba que el alcalde Almeida podría haber incurrido en un delito de prevaricación al «desmantelar» este monumento cuando quedaba muy poco para acabarlo.

La denuncia empezó a ser tramitada el 10 de febrero, según consta en una resolución de la Secretaría General del Tribunal de Cuentas. Ahora, se ha resuelto dando la razón al Consistorio y descartando los argumentos esgrimidos por la asociación. Para llegar a esta conclusión se solicitó al Ayuntamiento madrileño diversa documentación sobre las obras, su presupuesto y las decisiones administrativas adoptadas sobre el memorial.

Retirada de los nombres

El Gobierno capitalino de Partido Popular y Ciudadanos retiró estas placas encargadas por el anterior Ejecutivo de Manuela Carmena porque incluía a asesinos de las checas, las cárceles del bando republicano. Estos verdugos estaban entre los 2.934 nombres de los asesinados por el franquismo en la capital entre 1939 y 1944. Su presencia no gustó a las familias de sus víctimas.

Antes (arriba) y después (abajo) del Memorial del cementerio de La Almudena.

El Consistorio alegó entonces que eliminando los nombres de las placas se apelaba «al espíritu de reconciliación y concordia de los españoles». De esta forma, optaron por poner, en lugar de los nombres, la frase: «El pueblo de Madrid a todos los madrileños que del 36 al 44 sufrieron la violencia por razones políticas, ideológicas y religiosas. Paz, piedad y perdón». No querían mencionar el nombre de republicanos que también habían cometido actos de barbarie. Además, el equipo de Almeida echaba en falta incluir a todas las víctimas en la franja entre el 1936 y 1939 de ambos bandos, que inicialmente quedaban fuera del proyecto de Carmena. En origen el monumento se circunscribía a las víctimas fusiladas en esa tapia del cementerio entre 1939 y 1944.

«Reconciliación»

Según aseguró en su día la portavoz del Gobierno local, Inma Sanz, la decisión se tomó para que el memorial honrase en general a quienes murieran de forma violenta también durante esos años. El objetivo era un memorial «en positivo» y que sea «un símbolo de los grandes valores de la Transición en la que los españoles conseguimos reconciliarnos». Así, el memorial en el cementerio de la Almudena a los represaliados por el franquismo, tampoco hará finalmente alusión directa a las víctimas del bando republicano como sugería Vox.

El Gobierno local, además, recordó que el ya «extinto» Comisionado de Memoria Histórica, que se nombró por consenso, recomendó en su momento que «no existieran» nombres de víctimas en el memorial ante la «posibilidad de que eso generase más heridas de las que supuestamente venía a reparar». Sin embargo, Manuela Carmena obvió dicha consideración y se empeñó en mencionar a los 2.934 fusilados en las tapias de la Almudena únicamente tras la Guerra Civil, entre 1939 y 1944.

El abogado Eduardo Ranz, conocido también por impulsar la exhumación del dictador Francisco Franco, y su pareja Macarena Orosa, aseguraban que la actuación del equipo de Almeida sobre el memorial «va más allá de la ideología y afecta también al bolsillo de los madrileños». Ahora, OKDIARIO se ha puesto en contacto con dicha asociación pero, por el momento han evitado hacer valoraciones.

Largo Caballero

Precisamente en las últimas semanas en Madrid se ha suscitado un intenso debate por la retirada de la placa a Francisco Largo Caballero, presidente del Consejo de Ministros durante los primeros meses de la Guerra Civil mientras en Paracuellos del Jarama se asesinaba a miles de personas sin un juicio justo. De hecho, Santiago Carrillo señaló en sus memorias en relación a esas matanzas que «el Gobierno y el presidente de la República no lo ignoraban y tenían responsabilidad en todo cuanto estaba sucediendo en Madrid [esos meses]».

En este sentido, por la retirada del homenaje por parte del Ayuntamiento de Madrid del homenaje en forma de placa en su casa natal en Chamberí el grupo municipal del PSOE y el ala carmenista del grupo de Más Madrid también han registrado sendas denuncias.

Lo último en España

Últimas noticias