C’s impondrá condiciones a la moción de censura para evitar que Sánchez se siente en Moncloa

investidura
Pedro Sánchez quiere la abstención de C's en la investidura
Carlos Cuesta

Ciudadanos impondrá condiciones a la moción de censura para intentar que Pedro Sánchez no se siente en La Moncloa. El partido de Albert Rivera está dispuesto a respaldar una moción, pero siempre que sea distinta de la presentada por el PSOE. Y, básicamente, porque no quiere que el secretario general socialista llegue al Gobierno de España.

Los cálculos de Ciudadanos son claros. No quiere que siga el Gobierno de Mariano Rajoy. Pero tampoco que entre en el poder un partido —el PSOE— al que las encuestas le auguran un dudoso futuro y que podría aprovechar su toma de poder para intentar truncar el actual avance de Ciudadanos.

Por ello, la moción que está dispuesto a negociar el partido naranja con los socialistas parte de que Sánchez no se pueda sentar en La Moncloa, que no pueda ceder terreno ni a los separatistas ni a Podemos y que, bajo ningún concepto, pueda contar con un plazo abierto para convocar elecciones: debe ser presidente únicamente para llamar a las urnas de forma automática.

Las condiciones serán tan exigentes que, obviamente, Sánchez no podrá respaldarlas con esa definición. Y eso supondrá que el líder socialista se quedará ante la tesitura de tener que elegir si quiere ser investido presidente con los votos de Podemos y los separatistas de Puigdemont y Junqueras, o si prefiere renunciar.

En Ciudadanos temen que Sánchez intente ir hasta el final y quiera ser presidente a toda costa.

Pero, en cualquiera de las opciones, la estrategia de C’s estaría saliendo por donde ellos esperan. Porque, en ningún caso, los naranjas respaldarían a un Gobierno con presencia o influencia de los nacionalistas o podemitas y porque, de ninguna manera, se habrían quedado de brazos cruzados ante la sentencia de Gürtel.

Con esta estrategia, Ciudadanos cree que la pelota pasará al tejado del PSOE. Porque si sigue adelante con la moción, lo hará apoyado en los bloques —populistas y separatistas— que más daño le pueden hacer, porque su gobernabilidad será un horror, y porque su propio partido acabará censurándole.

Con esas bazas es con las que jugará Ciudadanos esta partida. Una partida en la que Mariano Rajoy ya ha dejado claro que no quiere prisas. Que pretende estirar los plazos de la legislatura y que, antes de nada, quiere jugar la baza del recurso en la sentencia de Gürtel.

Frente a esa postura, en Ciudadanos también pretenden obtener rédito. Porque saben que están pendientes las sentencias de los casos Lezo y Púnica y que, por lo tanto, será muy complicado que el PP descanse a efectos de imagen pública y de golpeo mediático por las acusaciones de corrupción.

Esa situación, unida al cansancio de los votantes del PP por la aplicación light del 155, se convertiría en la mecánica de ganancia de voto de Ciudadanos hasta el momento definitivo de unas futuras elecciones.

Lo último en España

Últimas noticias