La Unión de Guardia Civiles denuncia a Trapero ante la Audiencia Nacional por sedición

La Unión de Guardia Civiles ha presentado una denuncia ante la Fiscalía de la Audiencia Nacional contra el major de los Mossos, José Luis Trapero, por los delitos de sedición, desobediencia y omisión en el deber de perseguir delitos.

«A pesar de los requerimientos judiciales que ordenaron la paralización (del referéndum suspendido por el Tribunal Constitucional), la absoluta irresponsabilidad por parte de la Generalidad y los mandos de los Mossos d’Esquadra tuvo que ser sustituida por el compromiso y la profesionalidad de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, concretamente por la Policía Nacional y la Guardia Civil», se lee en el texto de la denuncia, a la que ha tenido acceso OKDIARIO.

Los guardias civiles reprochan «la falta de principios legales en todo lo ocurrido durante el día uno de octubre y la violencia con la que se ejecutaron los hechos» que, dicen, «no solo ha amenazado resoluciones judiciales, sino que ha atentado abiertamente contra la Democracia, la libertad, la convivencia y el Estado de Derecho Español».

«El referéndum secesionista, no cabe duda de que ha sido una consulta ilegal, que ha violado los preceptos de la Constitución Española, asaltando los fundamentos del Estado y cuyos impulsores han amedrentado al resto de españoles», continúa.

En el escrito, muy duro, consideran que Trapero «ha provocado que la confianza que ofrece a día de hoy este cuerpo policial sea nula» y creen que «los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil fracasaron en gran parte de sus objetivos, por la negligencia, la pasividad notoria y ánimo de dificultar las actuaciones que llevaron a cabo los Mossos».

El responsable de los Mossos, dicen, «lamentablemente optó por anteponer su ideología política al criterio profesional y a las órdenes judiciales que debía ejecutar».

Los guardias civiles acusan a la dirección de los Mossos de diseñar, a sabiendas, un dispositivo totalmente «fraudulento». «Es decir, no se tomaron las medidas suficientes para desalojar los centros de votación ocupados por centenares de personas, dejando de lado su obligación de intervenir por orden judicial y detener la consulta ilegal programada».

«Los mandos del cuerpo policial catalán afirmaron que acatarían las órdenes de los jueces, mientras organizaban un operativo policial fraudulento e ineficaz, que consiguió que parte de este cuerpo resultase incapaz de actuar conforme a los principios básicos de actuación de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad», prosigue la denuncia.

En este sentido, describen, «el operativo policial consistió en organizar a todo el cuerpo de Mossos en grupos pequeños, sin coche policial, sin poseer una emisora por cada agente y situándose ante centros de votación ilegal que llevaban horas ocupados, limitando el poder de actuación de los agentes policiales al no tener refuerzos de ningún tipo».