El PP rechaza el Debate sobre el Estado de las Autonomías en el Senado: «No es el momento ni el formato»

Presupuestos
El Senado durante un Pleno. (Foto: Twitter)

El PP se ha opuesto este martes a la celebración del debate del Estado de las Autonomías que el Reglamento del Senado obliga a convocar anualmente y que no tiene lugar desde hace 12 años, al entender que su formato es poco ágil e improductivo y que sólo sería viable si antes se acomete una reforma reglamentaria.

La senadora de Nueva Canarias María José López Santana, del grupo Mixto, había solicitado por carta al presidente del Senado, Pío García-Escudero, la convocatoria «inmediata» de este debate, del cual sólo ha habido tres ediciones, en 1994, 1997 y 2005.

El requerimiento ha sido estudiado en la Junta de Portavoces, donde lo han apoyado todos los grupos salvo el popular, que tiene mayoría absoluta en la Cámara Alta, bajo el argumento de que no es el momento oportuno para celebrarlo, según ha explicado el portavoz del PP, José Manuel Barreiro.

El asunto ha pasado después a la Mesa, que ha decidido a su vez dar traslado de la solicitud a la Mesa de la Comisión General de Comunidades Autónomas, en cuyo seno se celebra el debate autonómico; allí es presumible que la mayoría del PP también la rechace.

Tras conocer la posición del grupo popular, la senadora Santana se ha mostrado «absolutamente escandalizada» por su negativa a un debate sobre el que, ha subrayado, el Reglamento es «taxativo» al establecer su convocatoria anual.

Ha recordado que el PP apoyó en febrero una enmienda a una moción en la que se instaba a cumplir el Reglamento en esta materia y ha concluido que el PP ha decidido no sólo incumplir la norma sino también lo que sus propios senadores votaron.

López Santana ha advertido de que se está enviando a los ciudadanos el mensaje de que «lo que hacemos aquí no sirve para nada» y ha apuntado además que se está «dando la razón» a los ciudadanos que dicen que hay que cerrar el Senado.

Desde el PDeCAT, su portavoz, Josep Lluís Cleries, ha anunciado el respaldo de su grupo al debate autonómico, que ve diferente a la Conferencia de Presidentes Autonómicos a la que no acudió Carles Puigdemont, y ha denunciado el fracaso del Senado como Cámara Territorial y de diálogo mientras el Gobierno mantiene un «estado de excepción» en Cataluña aplicando, ha dicho, «por la puerta de atrás» el artículo 155 de la Constitución por el referéndum del 1-0.

También ha manifestado que si ganara el «sí» a la independencia en el referéndum ilegal, los senadores del PDeCAT tendrán que decidir si continúan o no en la Cámara Alta, para apuntar: «Nosotros aquí no hemos de estar un minuto más del necesario para cumplir con nuestra misión».

Por parte de Unidos Podemos, su portavoz, Ramón Espinar, ha coincidido en que sí es oportuno el debate del Estado de las Autonomías y lo ha desvinculado de la Conferencia de Presidentes celebrada este año en el Senado porque no tiene «nada que ver».

Ha aprovechado para acusar al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de «romper» España por negarse al diálogo con Cataluña y ha defendido la asamblea de cargos promovida por su grupo porque, aunque sin capacidad de decisión, tendrá mucha «fuerza simbólica» a la hora de responder a un Gobierno que, según ha señalado, «ha suspendido la democracia en Cataluña y en el conjunto del Estado».

Barreiro justifica el rechazo

El rechazo del PP al debate autonómico ha sido justificado por su portavoz, José Manuel Barreiro, quien ha aclarado que su grupo no descarta convocar el debate pero tras una reforma reglamentaria, porque con el formato actual nunca tuvo buenos resultados en sus tres ediciones con los presidentes González, Aznar y Zapatero.

Barreiro ha arremetido contra el portavoz del PDeCAT, al que ha acusado de «hipocresía» por respaldar este debate cuando el propio Carles Puigdemont se negó a acudir a la Comisión General de Comunidades Autónomas para explicar el referéndum independentista.

El vicepresidente del Senado, Pedro Sanz, ha insistido por su parte en que el debate reclamado por la oposición, con su actual formato, es una sucesión de «monólogos» de presidentes autonómicos «poco productivo» y ha dicho que «de alguna forma» ha sido sustituido por la Conferencia de Presidentes, que es mucho más efectiva.

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