Sánchez aprovecha el ‘show’ de Podemos y atiza a la gestora: «Se equivocó al posponer el Congreso»

Pedro Sánchez
Pedro Sanchez. (Foto: EFE)

El ex secretario general y precandidato a las primarias del PSOE, Pedro Sánchez, ha aprovechado el ‘show’ de Podemos al plantear una moción de censura a Mariano Rajoy sin registrarla para atizar a los suyos en pleno mitin de campaña.

Sánchez se encuentra este jueves en Viveiro (Lugo) donde lanzó un mensaje a la gestora del PSOE que preside el asturiano Javier Fernández: «Hace un año no hubiera hecho falta una moción de censura para desalojar al PP». 

Entre las ‘perlas’ que soltó el ex líder del partido hacia los suyos en pleno mitin de campaña también se encuentra la frase: «La gestora se equivocó al posponer el Congreso. Un PSOE sin líder no beneficia al partido ni a España, solo beneficia a Rajoy». «A quienes quieran empezar la casa por el tejado: Rajoy debe comparecer en el Congreso y asumir sus responsabilidades políticas en forma de dimisión», dijo Sánchez.

El dirigente socialista consideró, sin embargo, esta mañana que la moción de censura de Podemos «no es un planteamiento serio», sino un intento de «aprovecharse de la situación» que viven los socialistas.

«Mala fe» de Iglesias

Todo el PSOE ha revivido este jueves la conmoción de hace un año, cuando Pablo Iglesias anunció por sorpresa un gobierno de coalición mientras Pedro Sánchez estaba con el Rey, y se ha revuelto con unanimidad inusitada contra su «mala fe» y su intento de golpearles en plenas primarias con una moción de censura.

«Entonces nos engañó, ahora no nos va a engañar», dijo el portavoz parlamentario, Antonio Hernando, mientras los tres candidatos a liderar el partido lamentaban que una vez más el líder de Podemos se vuelque en golpes de efecto que solo les hacen daño a ellos.

Con su anuncio de hoy, Pablo Iglesias sitúa al PSOE (y a Ciudadanos) en el «no» a echar a Rajoy y a Podemos liderando la oposición, mientras el PP sonríe, aliviado porque al menos durante un tiempo pierde potencia el foco que ilumina sus casos de corrupción. Hay quien cree que lo que pretende Iglesias es allanar el camino a Sánchez, mientras otros lamentan el perjuicio que supone para las aspiraciones de éste que Podemos no abandone la política espectáculo.

El paso de Iglesias también puede interpretarse como el único posible para mostrarse más radical que Pedro Sánchez, después de que éste haya mostrado mayor contundencia que la gestora al exigir la dimisión de Rajoy. Según ha dicho Hernando, Iglesias informó al presidente de la gestora, Javier Fernández, de que iba a proponer una moción de censura «diez minutos antes de anunciarlo en rueda de prensa», prueba palpable de que lo que menos le importa es si prospera.

«Cuando uno quiere que una moción de censura prospere no dice que, pase lo que pase, la va a presentar y que luego hablará con los demás, sino que la trabaja y después la anuncia», sostuvo el portavoz socialista.

Casi al mismo tiempo de que el líder de Podemos abandonara la sala de prensa del Congreso desde la que ha hecho su anuncio, entraba en ella Hernando para dejar claro que «la respuesta es no» y acusarle de haber obrado «con la misma mala fe y falta de rigor» con la que hace un año anunció un gobierno de coalición y terminó votando contra Pedro Sánchez.

Susana Díaz, a la que la bofetada de Iglesias ha pillado en un acto en Huelva, ha dicho que éste no quiere una moción de censura contra el presidente del Gobierno, sino «ser el centro de atención». «Lo tenemos muy visto», ha constatado la presidenta andaluza, para quien «la operación de hoy es la misma que hizo cuando salió proponiéndose a sí mismo como vicepresidente del Gobierno, repartiendo cargos y pidiéndose el CNI».

Los mismos argumentos y la misma desconfianza ha volcado el otro precandidato a liderar el PSOE, Patxi López: «¿con qué candidato y con qué apoyos pretende sacar adelante su moción de censura? ¿Ahora sí vale el apoyo de Ciudadanos?», se preguntó en su cuenta de twitter. López también ha sido de los que ha reprochado a Iglesias que «cuando tuvo la oportunidad real de cambio en España votó no a un presidente socialista».

El malestar por la ‘jugada’ ha sido compartido por los barones socialistas, entre ellos, el presidente extremeño Guillermo Fernández Vara, para quien solo la «neurosis obsesiva» de Podemos por el PSOE explica su «estrategia de acoso y derribo en pleno proceso de primarias».

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