Méndez de Vigo asegura que los convocantes de la huelga de educación «critican mucho y aportan poco»

El portavoz del Gobierno y ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, se ha referido hoy a las asociaciones y sindicatos de padres, alumnos y docentes que han convocado una huelga general educativa este jueves argumentando que en el debate sobre el pacto educativo critican mucho y aportan poco.

Lo ha asegurado en el Foro ABC-Deloitte, donde ha especificado que la huelga -convocada por la Plataforma Estatal por la Escuela Pública- no está convocada por todos los docentes y padres, sino solo por algunas asociaciones de ellos junto con un sindicato (en referencia al Sindicato de Estudiantes) que tiene «una clara relación política».

Ha comentado que en estos momentos hay «buena voluntad» para trabajar por un pacto educativo, como lo demuestra el debate de la subcomisión creada en el Congreso.

Precisamente algunos de los convocantes de la huelga han acudido a ese debate pero «han aportado poco, desgraciadamente han criticado mucho pero aportar poco», ha subrayado.

«En estos momentos de tranquilidad hay que contribuir con ideas y no con otras cosas», ha añadido el ministro.

Por otra parte, Méndez de Vigo ha pedido a las comunidades autónomas que no anuncien la convocatoria de oposiciones docentes durante marzo y que esperen a finales de mes o primeros de abril cuando el Gobierno presente los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

El Ejecutivo «está estudiando» cuáles son las actuales necesidades de plantillas, según Méndez de Vigo, que ha destacado su voluntad de «convocar oferta de empleo público».

Ha comentado que el número de docentes interinos es «muy elevado» y que hay que reducirlo para «dar garantías de estabilidad».

En el acto, al que ha acudido el presidente del Senado, Pío García-Escudero, y la delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, el ministro ha resaltado que la clase de religión o el concierto de centros son temas que «no van a quedar fuera del pacto educativo».

No obstante, ha opinado que la regulación actual de la Religión y su contrapartida, Valores, es «correcta».

Ha reconocido que «la visión de la educación» que tiene pasa por enseñar los principios y valores, que para unos están en las convicciones religiosas y para otros en las éticas y morales.

Y ha recordado que el Gobierno está a favor de que los padres puedan elegir libremente el tipo de centro en el que quieran que sus hijos estudien.

«El sistema educativo está bien conformado, tenemos que mejorar aquello que funciona, no eliminarlo», ha recalcado respecto a los conciertos.

Preguntado sobre la fórmula de los «cheques escolares» (financiación educativa entre Estado y padres), el ministro ha contestado que «no es viable en estos momentos» y que introducirlos «acabaría con el sistema» cuando el actual está «bien organizado».

Por último, no se ha mostrado partidario de separar el Ministerio de Educación del de Cultura: «creo que están muy bien juntas la educación y la cultura» y «estoy enormemente satisfecho de ser ministro de Educación, de Cultura -también de Deporte-, el complemento entre una y otra es enorme».