Gestores de banca privada de Deutsche Bank España se incorporan a Credit Agricole

Deutsche Bank
Una oficina de Deutsche Bank.

Hace tan sólo unos días OKDIARIO titulaba el equipo de banca privada de Deutsche Bank España se irá en bloque a Credit Agricole. Este viernes podemos informarles, pues la propia Credit Agricole así nos lo ha confirmado, de que Íñigo Calderón se incorpora al proyecto de la entidad francesa abandonando el banco alemán.

Aunque no han querido darnos más detalles ni más nombres, este periódico ha podido saber que en su nueva aventura le acompañan otros compañeros de armas como Ignacio Guzmán, Enrique Revuelta y Andrés Francoy.  No sólo eso sino que en el mercado continúa el rumor de que podrían sumarse a estas bajas las delegaciones que los alemanes tienen en Barcelona, Valencia y Sevilla.

El propio Deutsche Bank ha confirmado a OKDIARIO la marcha de Calderón pero la permanencia de David Nogues, Luis Antoñanzas y Diego Rosillo. Antoñanzas, como decíamos en el articulo anterior, era quien estaba «pastoreando» el banco cuando se estaba produciendo una auténtica rebelión a bordo con riesgo de que se fueran todos en bloque pero nos dicen fuentes internas del banco, que la balanza en esta guerra se inclinaría sobre quien pudiera llevarse a Diego Rosillo al que consideran la persona clave en esta división.

Parece ser que si finalmente no se ha concluido con la salida de todos, tal y como nosotros informábamos después de haber hecho un periplo por las grandes entidades nacionales e internacionales con sede en Madrid buscando la mejor oferta, se ha debido a la intervención del propio CEO mundial de Deutsche Bank, Jon Cryan. A mediados de octubre y tras verse fracasada la venta de la división española del banco germano (hay quien asegura que porque no hubo ninguna oferta lo suficientemente interesante), Cryan comunicó a su staff directivo que España debía ser una pieza clave en el nuevo resurgimiento de la entidad germana (muy tocada por la crisis y por los múltiples escándalos financieros en los que se ha visto envuelta).

Para ello ha dado órdenes a sus ejecutivos, en nuestro país el máximo responsable es desde 2004 Antonio Rodríguez-Pina, de que no escatimen medios y que pidan a Alemania todo aquello que puedan necesitar para poner el banco de nuevo en órbita. Sólo así se entiende, dicen nuestras fuentes, que finalmente se haya abortado una operación que ya estaba hecha y cuyos protagonistas habían recorrido las sedes de sus competidores para irse antes de que el banco alemán se hundiera.

Estas cosas, nos dicen, se suelen solventar tirando de chequera igualando, menos probable, o mejorando la oferta que sus homólogos franceses habían hecho por este equipo de élite y que algunas fuentes del mercado establecían en un 30% de incremento de sueldo así como toda una revisión al alza de sus bonus y complementos de todo tipo.

No hay que olvidar que el equipo de banca privada de Deutsche Bank España tiene un patrimonio bajo gestión que supera los 4.000 millones de euros, lo que le reporta al banco unos ingresos anuales por vía comisiones de más de 80 millones de euros. Una cifra nada despreciable que permite ser muy generoso con aquél talento que ha conseguido levantar semejante capital.

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