Boicot a los productos catalanes en las redes: listados de empresas y una App que permite identificarlas

GALLINA BLANCA
Productos de GB Foods.

Los órdagos continuos de Carles Puigdemont y el desafío independentista de Cataluña provocan casi instantáneamente una oleada de movimientos que piden dejar de lado a la industria catalana. Las redes sociales están haciendo ruido contra los productos fabricados en la región, las compañías ubicadas en Cataluña y las que apoyan el divorcio con España. La solución: proponer diferentes alternativas para no consumir sus servicios y los productos que ofrecen.

No es la primera vez que sucede. Sin ir más lejos, tras las informaciones publicadas por este periódico, Decathlon y Carrefour fueron las primeras que estuvieron en el punto de mira de Twitter por discriminar el castellano. Pero, ni mucho menos son las únicas. Bajo el hashtag #BoicotProductosCatalanes o #BoicotCataluña los usuarios de la red están movilizándose contra marcas como Noel Alimentaria -cuya directora general Anna Bosch está entre las filas del lobby independentista FemCat-, el famoso batido Cacaolat o Gallina Blanca, de GB Foods, cuyos propietarios son la familia Carulla.

Entre los productos también se cuelan supermercados, como Bonpreu y Esclat, cuyo dueño es Joan Font, que es además uno de los patronos de FemCat y que ha exhibido en varias ocasiones su apoyo al independentismo, como cuando animó a sus empleados por Twitter a participar en la manifestación de la Diada de Cataluña.

La última novedad para el boicot ha sido la creación de una aplicación móvil, SeparApp, que permite localizar y ubicar las empresas que producen y desarrollan su actividad en Cataluña. Sin embargo, la aplicación no diferencia entre compañías que apoyan la independencia o no. Su filtro es el domicilio social de las empresas: es decir, si su sede se encuentra en Cataluña. En su descripción web, se da a conocer que hasta este jueves, ya cuentan con un gran número de descargas: entre 5.000 y 10.000.

Alcampo puede salir perdiendo

En Twitter, también están circulando imágenes del Alcampo de Mataró (Barcelona) donde la cadena de supermercados señala en varios lineales “productos de Cataluña”, bajo la bandera de la comunidad. Fuentes oficiales de la compañía señalan que lo hacen en las regiones donde están presentes: “destacar y señalizar el producto local es algo que hacemos en todas las localidades donde estamos presentes y forma parte de nuestro compromiso con los productores locales. Así en los centros de Cataluña  señalizamos los productos catalanes,en los de la Comunidad Valenciana los valencianos, en los de Andalucía los andaluces, etc.”.

Sin embargo, esto se está volviendo en su contra ya que, en las redes sociales se está difundiendo para hacer boicot a compañías como Ato, una marca líder en Cataluña que comercializa quesos, nata, mantequilla y leche.

Cataluña le vende a España 18.000 millones anuales

Lo cierto es que Cataluña es una comunidad dependiente del sector exterior. La comunidad es la más beneficiada de España por el comercio interregional dentro de nuestro país, con un superávit comercial de 17.900 millones de euros, según un informe del Centro de Predicción Económica y CEPREDE con Convivencia Cívica Catalana.

Aragón, la Comunidad Valenciana y Madrid son algunas de las regiones que ‘alimentan’ la economía de Cataluña. La comunidad vende el 27,5% a Aragón, el 12,7% a la Comunidad Valenciana y el 10,8% a la capital.

Dos de estas regiones también son las principales proveedoras de Cataluña: Madrid, que representa el 18,2% y Aragón, el 17,1%. El top 3 lo completa Andalucía, con un 15,4%.

Pero lo que los datos de CEPREDE ponen de relieve realmente es la importancia del resto de España para la economía catalana. Es más, de los 20 principales mercados de las empresas catalanas, 11 son comunidades autónomas españolas. De hecho, el principal mercado para la economía catalana no es ningún país extranjero, sino la comunidad autónoma de Aragón, donde las empresas catalanas venden 10.782 millones de euros. Cataluña necesita a España.

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