Cómo cambiar la percepción de la empresa

La imagen de marca es uno de los aspectos que más consideración tienen en el contexto de una empresa. En un mercado en el cual se ofrecen productos muy similares que satisfacen necesidades parecidas, la diferenciación puede venir marcada por elementos más emocionales y subjetivos.

Cuando una empresa lleva mucho tiempo en el mercado, entre los clientes puede darse la sensación de que se ha quedado atrás en comparación con las nuevas incorporaciones. Como consecuencia, una acción a realizar es cambiar la forma de percepción. Para conseguirlo, no en necesario ni tan siquiera realizar cambios significativos en el producto. Algunas de las estrategias son las siguientes: ç

Cambio en el logo: puede parecer un aspecto secundario, pero el logo es el primer impacto que el cliente percibe de la compañía. Según las formas, color o formato se transmiten ideas e imagen muy diferentes. Las compañías que llevan mucho tiempo sin cambiar de logo acostumbran a tener un estilo más tradicional. Las nuevas posibilidades del diseño gráfico permiten multitud de innovaciones para, con solamente cambiar el formato o los colores, transmitir una imagen totalmente distinta.

Cambio en el envase: cuando se realiza el primer consumo de un producto, no lo podemos ver porque se encuentra dentro de un envase. Por lo tanto, la decisión de compra en este momento puede venir motivada por el formato del envase y lo que haya escrito en él. En el lineal de un establecimiento puede haber muchos productos de distintas empresas. Por lo tanto, hay que buscar un diseño que permita destacar el nombre de la compañía y la calidad preferida por el público que se ha elegido elemento diferenciador.

Vinculación con alguna persona reconocida: asociarse a una persona que ejerce influencia en un determinado sector o entre el público de una edad específica puede reportar grandes beneficios. No se trata de una publicidad tan directa como la habitual y, gracias a la prescripción de esta persona, se gana en confiabilidad. Ahora bien, hay que elegir muy bien a este sujeto porque cualquier acción que haga puede tener un impacto en la imagen de la empresa. Evidentemente, cuantas más personas tenga bajo su influencia, mayor el coste a soportar.

Publicitarse por canales distintos: prácticamente todas las empresas disponen ya de página web y cada día son más las que venden a través de este canal. Del mismo modo, las estrategias de SEO y SEM son de obligado seguimiento ya que una parte muy importante de las búsquedas ya se realizan por Internet.