Irlanda nomina al gobernador de su Banco Central, Philip Lane, al puesto de economista jefe del BCE

«Tengo la satisfacción de nominar al gobernador Lane al Consejo Ejecutivo del BCE», dijo Donohoe, destacando que el banquero irlandés es un eminente economista, que goza de un elevado prestigio en Europa y está muy preparado para jugar un papel de liderazgo en el desarrollo y supervisión de la política monetaria en la eurozona. «Apoyaremos a Philip en sus esfuerzos para conseguir este trabajo», añadió este lunes a su llegada al Eurogrupo en Bruselas.

A su llegada a la reunión en Bruselas, Donohoe ha defendido la candidatura de su compatriota al directorio del BCE, señalando que Lane «ha hecho un trabajo excepcional liderando el Banco Central irlandés durante la fase actual de estabilidad económica en Irlanda y ha demostrado sus credenciales como banquero central de primer orden, jugando un papel importante en muchas instituciones europeas, donde ha estado involucrado en muchos proyectos sobre bancos centrales y diferentes políticas».

«El sobresaliente historial económico, financiero y político del profesor Lane lo posiciona idealmente para ocupar un asiento en el Consejo Ejecutivo del BCE», ha declarado el ministro irlandés.

Los ministros de Finanzas de la zona euro tienen previsto pactar el nombre de un candidato para el puesto que quedará libre en el directorio del BCE en su reunión del próximo 11 de febrero para que un día después el Ecofin adopte una recomendación formal dirigida al Consejo Europeo.

En este sentido, el Ministerio de Finanzas de Irlanda ha puesto de relevancia que Philip Lane ocupa actualmente la presidencia del Comité Técnico de Asesoría del Consejo Europeo de Riesgo Sistémico (ESRB), así como su anterior paso como presidente del Grupo de Trabajo de Alto Nivel sobre Activos Seguros y la Presidencia del Comité Científico Asesor, que demuestran su consideración a nivel europeo.

Con la nominación de Philip Lane al puesto que dejará vacante Peter Praet en el directorio del BCE, Irlanda vuelve a intentar obtener un cargo en la ejecutiva del banco central de la zona euro, después de una primera tentativa el año pasado, cuando el gobernador del Banco Central de Irlanda fue el único rival del español Luis de Guindos por el puesto de vicepresidente del BCE.