Montoro retrasa a la primera semana de abril la presentación de los PGE de 2018

El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha retrasado una semana más la fecha límite para presentar unos nuevos Presupuestos. Hasta ahora, el Gobierno manejaba el mes de marzo para aprobar en Consejo de Ministros las cuentas de 2018.

«El Consejo de Ministros tiene límite hasta final de marzo. Si me apuran, la primera semana de abril. Pero no mucho más, porque además resulta que a finales de marzo es Semana Santa. Tampoco hay que ponerse así», ha manifestado el ministro, durante su comparecencia ante la Comisión de Presupuestos del Congreso, ante la que comparece para explicar el acuerdo de prórroga presupuestaria.

Aprobando el proyecto de ley de Presupuestos en la primera semana de abril, ha dicho Montoro, las nuevas cuentas podrían entrar en vigor a finales de junio. Ese es el límite que se marca el Ejecutivo para no superponer el inicio de la tramitación de las siguientes, que el ministro emplaza a la fijación de los objetivos de estabilidad presupuestaria.

«No tiene ningún sentido… Imagínese la situación que el Congreso apruebe una ley de PGE que se superponga con la tramitación de los Presupuestos del año que viene», ha dicho, recordando que el Gobierno aprueba en el último Consejo de Ministros de junio estos objetivos (conocido comúnmente como ‘techo de gasto’) para que puedan ser refrendados en el Congreso en julio.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, afirmó en enero que «lo ideal» sería que se pudiese adelantar la aprobación de los Presupuestos para este año respecto a las fechas de aprobación de las cuentas del año pasado, cuando se aprobó el 31 de marzo por el Consejo de Ministros y el 26 de junio en el Parlamento.

Para entonces, el ministro espera contar con los «apoyos políticos» en el Congreso ante la manifiesta minoría del Gobierno: «Somos un Gobierno tan en minoría que somos Gobierno en España porque el nombramiento se facilitó por buena parte del grupo socialista», ha dicho, recordando la investidura de Mariano Rajoy gracias a la abstención del PSOE.