China debate en secreto su agenda económica para 2018: crecer al 6,5%, reducir deuda y abrir mercados

china pib
El presidente de China, Xi Jinping. (Foto. Getty)

El presidente de China, Xi Jinping, inaugura este lunes la conferencia en la que su Gobierno decidirá las principales políticas económicas en 2018, tal y como hace cada año desde 1994 en un hotel de Pekín a puerta cerrada.  Reducir el apalancamiento, bajar los niveles de deuda y mantener un crecimiento sólido en el entorno del 6,5%, son los retos principales a los que se enfrentará su Gobierno en los próximos años.

Tras consolidar su poder en el XIX Congreso del Partido Comunista (PCCh), que tuvo lugar en octubre, se espera que la reunión de este año sea más importante que las de los anteriores, pues Xi  podría avanzar reformas dirigidas a la apertura de los mercados que prometió en el Congreso.

No obstante, en opinión de la Cámara de Comercio Europea en China, sería «sorprendente» que este año no hubiera «cambios significativos» respecto a las ediciones anteriores, al tratarse de la primera conferencia económica que se celebra tras el XIX Congreso.

En concreto, esta organización explicó a EFE que esperan que «se establezca una dirección más concreta para la nueva era» y que «se centren fundamentalmente en el excesivo nivel de deuda de China, que se ha convertido en la principal fuente de preocupación para muchos».

Además de acordar reformas económicas, medidas financieras y el rumbo de la política monetaria y fiscal, el Gobierno fijará un objetivo de crecimiento del PIB para 2018, aunque esta cifra no se desvelará hasta marzo del año que viene, cuando el partido celebre su congreso anual.

Después de la cumbre, que no se sabe en qué hotel de la capital tendrá lugar y se espera que concluya el próximo miércoles, el Gobierno emitirá un comunicado con las principales conclusiones, de las que se podrá deducir la hoja de ruta que seguirá China en el ámbito económico como mínimo el próximo año.

Según ha venido publicando la prensa china en los últimos días, se espera que tras un primer mandato quinquenal en el que Xi ha priorizado la lucha contra la corrupción, ahora dedique el segundo lustro a avanzar en la liberalización económica y acometer reformas estructurales de algunos sectores, como las empresas de propiedad estatal (SOE, en inglés).

Los medios chinos elucubran que será el propio Xi el que definirá la agenda de la reunión, rodeada de secretismo, asesorado por Liu He (de 65 años), uno de los 25 miembros del Politburó del partido y vicepresidente de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma.

Liu se baraja como posible candidato a suceder al viceprimer ministro chino, Ma Kai, de 71 años, en la dirección del Comité de Estabilidad Financiera y Desarrollo creado por China en noviembre para coordinar las reformas del sector, los cambios regulatorios y los asuntos de política monetaria y fiscal.

Durante la celebración del Congreso del PCCh, el Gobierno se mostró optimista con la previsión de crecimiento para este año, que había fijado en el 6,5%, y pronosticó que incluso cabía la posibilidad de superarla en 2017.

A pesar de que teóricamente el país va a dar prioridad a la calidad del crecimiento en vez de la cantidad, se espera que Xi vuelva a fijarse el mismo objetivo para 2018: crecer a un ritmo del 6,5%.

El líder chino, cuyo poder se elevó en octubre hasta el nivel del de Mao Zedong, también prometió en el Congreso una apertura de los mercados financieros a la inversión extranjera, una senda por la que ya ha dado algunos pasos, al levantar algunas restricciones en el sector de las gestoras de fondos, aseguradoras y sociedades de valores y futuros.

El sector financiero internacional ha dado la bienvenida a esta voluntad aperturista de China, aunque se muestra algo escéptico sobre la eficacia y velocidad con las que el país asiático emprenderá las reformas necesarias para lograrla.

Lo último en Economía

Últimas noticias