El Madrid aún tiene defensa: los números atrás son mejores que la temporada pasada

El mal momento por el que atraviesa el Real Madrid está causado por errores corales. Desde la mala conexión en el centro del campo, la falta de efectividad de los delanteros y los fallos de la zaga. La baja forma de jugadores determinantes han condenado al equipo a atravesar un bache que no se conocía con Zidane en el banquillo del conjunto blanco. Son muchos los que achacan este bajón al rendimiento defensivo. Cierto es que los errores en defensa están haciendo perder puntos a los madridistas, pero no es el principal problema.

Comparando los números de la presente temporada con esta, la zaga del conjunto madridista sale ganando. La plaga de lesiones que sufren los blancos desde el comienzo de la temporada ha provocado que el técnico sólo haya podido utilizar a su defensa de gala en cuatro ocasiones, encajando un gol. Sin embargo, en los otros 14 partidos, han encajado 15. Estos números no serían preocupantes si hubiese acompañado la efectividad en ataque.

Y es que la pasada campaña, los blancos vieron como los rivales perforaban la portería defendida por Kiko y Keylor en más ocasiones. Hasta 20 goles encajaron los madridistas en los primeros 16 partidos del curso. Cuatro goles más que ahora. Por aquel entonces, Keylor, Pepe, Varane, Marcelo, Danilo y Carvajal también habían causado baja en algún momento.

Los números del Madrid en defensa son ligeramente mejores a los del curso pasado. En todas las competiciones mejoran en comparación con la temporada 2016-17. En Liga, sin ir más lejos, los blancos han encajado un gol menos y han dejado su portería imbatida en tres ocasiones, por dos de la temporada pasada. En Champions, los madridistas encajaron cuatro goles en dos partidos ante el Legia de Varsovia. Un empate a tres en Polonia condenó a los de Zizou a la segunda plaza. Entonces, fueron siete los goles recibidos en los primeros cuatro encuentros, ahora son cinco.

El problema está en ataque

Entre Liga, Copa y Champions, los madridistas han marcado en lo que va de curso 36 tantos en sus primeros 18 encuentros. Exactamente salen a dos goles por partido. Las cifras en ataque se hunden si se comparan con las de la campaña anterior. El pasado año, a estas alturas, habiéndose disputado 18 partidos, los madridistas llevaban 56 goles a favor, 20 más que este curso.

Las exhibiciones del conjunto blanco en ataque eran normales. Prueba de ello es que 19 jugadores distintos habían logrado ver puerta entonces. Sin embargo, esta temporada, los goles se reparten entre 12 de los miembros de la primera plantilla. A esto hay que añadir el bajo rendimiento de los delanteros. Mientras que la pasada temporada la BBC era la encargada de hacer 22 de los 56 tantos de los madridistas, este curso llevan 13, nueve menos.

Los fallos en ataque se empezaron a hacer visibles desde la segunda jornada del campeonato. Dos goles ante el Valencia para salvar un empate en un partido que se había puesto cuesta arriba. Ante el Levante, la jornada siguiente, sucedería lo mismo. Otro empate, esta vez a uno, frente a un recién ascendido y fallando lo infalible. Ante el APOEL, los blancos ganarían con solvencia, pero los fallos también fueron clamosos. Y qué decir del choque frente al Betis…

Así hasta llegar a Montilivi. En Gerona los blancos se adelantaron pronto en el marcador, pero se vieron superados en todo momento por un recién ascendido. Los fallos ya no sólo eran de puntería, sino que venían de la creación. A los madridistas les costaba dar tres pases seguidos. Queda demostrado, por tanto, que el principal problema no está atrás. Sino que los madridistas tienen un verdadero problema del mediocampo hacia arriba, más que en la zaga.