Luis Suárez sigue con bula arbitral: agredió a Djené y se fue de rositas

Fernández Borbalán le perdonó la vida al Barcelona en el Coliseum Alfonso Pérez Muñoz. El colegiado almeriense, después desestimar la expulsión a Gerard Piqué, se comió la enésima agresión de Luis Suárez a un defensa rival, que vino minutos antes del primer gol del partido, obra del Getafe.

El charrúa, frustrado por el marcaje de la defensa del Getafe, se tomó la guerra por su cuenta y en una disputa con Djené, pisó al central africano en el momento justo en el que Fernández Borbalán no pudiera darse cuenta y así salir inmune de una nueva agresión, que debió suponerle la expulsión y dejar al Barcelona con un hombre menos durante casi una hora de partido.

El Barcelona no se encontró cómodo con el entramado defensivo de Bordalás y el resultado podría haber sido más amplio de haber enseñado el camino de los vestuarios tanto a Gerard Piqué como a Luis Suárez, después de la mano del catalán y la agresión con un pisotón por detrás del charrúa.