Motivos para creer

El Atlético de Madrid se ha ido al parón internacional después de dejar buenas sensaciones ante Las Palmas, haciendo olvidar, casi por completo, de lo que sucedió en la primera jornada frente al Girona. Aún así, los números no han sido malos, y con la más que posible renovación del Cholo Simeone, existen motivos para creer en la temporada del conjunto rojiblanco.

Esto solo acaba de empezar, pero las ilusiones están a flor de piel. Pelear por la Liga, la tan ansiada Champions o la siempre bienvenida Copa del Rey son los títulos que el aficionado del Atlético de Madrid tiene en la cabeza. Ni la sanción de la FIFA puede frenar ese optimismo del que se ha impregnado el hincha colchonero desde la llegada del Colo Simeone.

El castigo de la FIFA impedía al Atlético inscribir futbolistas, pero hay que ir más allá: se ha mantenido el bloque. Un bloque que no para de crecer y mejorar cada día. Los Oblak, Griezmann, Godín, Koke o Saúl, entre otros, están llamados a pelear por absolutamente todo. Calidad no falta en una plantilla que se verá mejorada cuando se incorpore Vitolo en enero, y más que posiblemente, Diego Costa. Jugadores que ya saben lo que es saborear el éxito, muchos defendiendo la rojiblanca.

No se puede olvidar que al frente de la nave continúa el alma del Atlético: el Cholo Simeone. Acalló todos los rumores en la despedida del Vicente Calderón asegurando que continuaba. Pero no sólo queda ahí. El Cholo Simeone está cerca de comprometerse con el conjunto rojiblanco hasta 2020. Un claro ejemplo de compromiso y confianza en el proyecto que está construyendo el Atleti.

Por otro lado, al club se le presenta una temporada histórica. Nuevo escudo y nuevo estadio. Qué mejor forma de continuar con la etapa gloriosa que atraviesa el Atlético de Madrid que acabar la temporada ofreciendo un título en el nuevo Metropolitano.

Ya toca la Champions

El Atlético de Madrid se ha consolidado entre los mejores equipos de Europa, y por consiguiente, del mundo. Los rojiblancos han rozado la Orejona en tres ocasiones a lo largo de su historia. Las tres derrotas en la final han sido de una forma cruel y dolorosa para un equipo, que por méritos propios la ha merecido.

En los últimos cuatro años se han llegado dos veces a la final. Ahora, con los futbolistas más maduros y vacunados ante estas decepciones, hay más hambre que nunca. Ganas de hacer historia coronándose como campeones de Europa, como han demostrado a lo largo de estas últimas temporadas.