ESPAÑA 4-1 ISRAEL: CLASIFICACIÓN MUNDIAL 2018

España gana de paseo

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Diego Costa, celebrando su gol ante Israel.
Miguel Serrano
  • Miguel Serrano
  • Me confundieron con un joven prodigio pero acabé de periodista. Escribo cosas de deportes y del Real Madrid en OKDIARIO, igual que antes las escribía en Marca. También a veces hablo por la radio y casi siempre sin decir palabrotas. Soy bastante tocapelotas. Perdonen las molestias.

España ganó sin ganas. Paseó y se paseó ante la débil selección de Israel, cuyo muro cayó en apenas cinco minutos. Los de Lopetegui no necesitaron ni acelerar para resolver el partido antes del descanso. Silva y Vitolo marcaron en la primera mitad y Diego Costa logró el tercero justo a la vuelta del descanso. Israel hizo el 3-1 cuando la selección ya dormitaba sobre el césped. Isco selló el triunfo al anotar el cuarto.

Lopetegui se convertía con su once titular en un imitador de Susana Díaz: tiraba de la vieja guardia. Como si fueran los Guerra, Felipe, ZP, Bono y demás barones del PSOE, el seleccionador apostaba por los Ramos, Piqué, Busquets, Iniesta o Silva. Con más o menos años, la verdad es que España no tiene futbolistas mejores.

No se había llenado El Molinón, quizá porque los partidos de selección en mitad de la temporada de clubes tienen menos tirón que un concierto de El Consorcio. Dominaba España en el arranque. Monopolizaba la pelota ante una selección de Israel bien posicionada, aunque con un repliegue quizá demasiado intensivo.

Era el guión de cada partido de La Roja. La pelota para nosotros y el rival encerrado en su área como Donald Trump en su torre de Nueva York. Cinco minutos tardó España en alcanzar su primera ocasión. Fue un disparo lejano de Thiago desde fuera del área que, tras rozar la pelota el portero de Israel, se estrelló con violencia contra el larguero. Vitolo desperdició el rechace.

Respondió Israel con una contra de Zahavi que se comió Piqué, pero el central español llegó a tiempo de rectificar y evitar males mayores. Era un aviso de los israelíes de que España debía también guardar su retaguardia. Pero respondió rápido La Roja y Silva marcó con caño incluido a los doce minutos tras una asistencia con caño incluido también de Jordi Alba.

Domina España

Con el resultado encarrilado para España, Israel tenía que recomponer su planteamiento, porque de nada le servía ya acumular gente en torno a su propio muro de las lamentaciones. Zahavi volvió a avisar en el 22 con un disparo que lamió el palo derecho de De Gea, que había cubierto portería perfectamente porque estaba bien colocado (no como otros).

España llevaba unos minutos paseando por el césped de El Molinón como unos jubilados por el parque. Sólo les faltaba un poco de pan para echar de comer a las palomas. El partido parecía fácil, pero no era momento de caer en la autocomplacencia. Ya saben lo que decía el Señor Lobo.

El partido se volvió un tostón infumable como la lectura del BOE de libro de cabecera. España tocaba sin ganas, sin ritmo, sin ningún tipo de movimiento ni desmarques y los israelíes emulaban a Pocholo: les valía con estar bien colocados. Se aburría El Molinón, que ni animaba siquiera. Mientras esperábamos el descanso De Gea evitó el 1-1 con un paradón escandaloso que salvó el bote del delantero israelí y demostró por qué va a ser el próximo portero del Real Madrid.

Y en el 45, cuando ya nos íbamos al descanso, Vitolo marcó con un tiro flojito, raso y fácil que se comió el portero israelí, de nombre Marciano, al más puro estilo Keylor Navas. España, sin juego ni alma, pasaportaba el partido antes del descanso.

Partido finiquitado

Tuvo el 3-0 Diego Costa nada más comenzar el segundo tiempo, pero se hartó de balón y falló un cabezazo cantado después de la asistencia medida de Carvajal. Sí lo logró en el 50 a la salida de un córner botado por Thiago, así que el partido estaba más que resuelto con toda la segunda mitad por delante.

El cuarto lo rondó Silva, cuyo disparo tras asistencia de Carvajal, el más activo de España, se estrelló contra la escuadra. España paseaba y se paseaba. El partido era un paseo en toda regla. Lopetegui sacó a Koke por Thiago para intentar agitar un duelo que era un embalse.

Caían lentos los minutos de pachanga y España se aburría de tocar. Sólo Carvajal aceleraba un duelo mortecino en el que Israel ni siquiera inquietaba la meta de De Gea. Isco era el segundo cambio de La Roja. Salía del campo Iniesta, que no está para muchos trotes, pero para jugar andando le da hasta los cuarenta. Le ovacionaba El Molinón más por su pasado que por su presente.

Israel logró el gol del honor a balón parado. Fue un cabezazo que se estrelló contra el poste derecho de De Gea y el rechace lo aprovechó Refaelov con una volea tremenda. Dormitaba media defensa de España, llena de jugadores hipertensos.

El gol de Israel no sirvió para nada. El partido siguió muriéndose lentamente y España al final logró el cuarto, obra de Isco, para sellar una victoria tan previsible como insípida en su transcurrir con eficacia y sin brillo por la fase de clasificación camino del Mundial de Rusia 2018. Anda que no queda.

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