Ferrari y Mercedes temen la revolución del McLaren-Honda de Alonso

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Fernando Alonso, en su McLaren-Honda. (AFP)
Ignacio L. Albero

Con bandanas japonesas rodeando su frente, miles de termos de café, noches de insomnio y horas, muchas horas de duro trabajo pretenden volver McLaren y Honda a la cima de la Fórmula 1. Como un político en plena campaña electoral se han hartado de prometer y prometer en este 2015, pero sus pretensiones se han quedado al nivel de UPyD el pasado 20D. La realidad de un motor inoperante les ha circunscrito a la mediocridad. Pero no todo está perdido ni es el final. Como diría Aragorn en El Señor de los Anillos “siempre hay esperanza”.

Y más cuando se habla de la suma de dos leyendas en una ecuación que sólo podía dar lugar a victorias. La incógnita no se ha resuelto en la unidad de potencia Honda durante este fatídico año pero una, y no más. La revolución para 2016 promete tener más éxito que la Francesa en el siglo XVIII. Si la comparación puede resultar exagerada, tomar la referencia de 2015 hace que pueda ser más comprensible.

Con su particular Hymn for the weekend, y no precisamente el de los británicos de Coldplay, pretenden volver a canturrear en fin de semana de gran premio. Los rivales empiezan a tomarles en serio. Adrian Newey ha sido el primero en advertir el potencial del matrimonio británico-japonés: “Creo que Honda, por lo que hemos visto, mejorará considerablemente. Su motor de combustión es bastante razonable. Su mayor problema este año ha sido que han centrado la unidad de recuperación de energía (MGU-H) en el turbo, que era muy pequeño. Y este problema se puede solucionar en invierno”.

En ello andan desde Sakura, intentando poner orden en la tortuosa unidad de potencia. Dicen que desde verano ya sabían donde estaban los inexplicables problemas. Dicen… Arai, el principal especulador y eje de los mentideros acerca de Honda, vuelve a repetir el discurso de todo un año donde ha traicionado a la verdad en más de una ocasión. El España va bien de la Fórmula 1 pretende pasar de broma a realidad en 2016. Dice que la “comunicación es excelente” con los de Woking y que “tienen los datos que necesitan saber” para impulsar los sueños de McLaren.

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Alonso durante el GP de México. (Getty)

El concepto tamaño cero continuará para hacer de su motor el más compacto de la parrilla…pero tratando de hacer respirar a la parte eléctrica del mismo. O eso esperan. Eric Boullier lo tiene claro: “Si podemos arreglar éste y otros problemas, podremos ganar un par de segundos en términos de rendimiento. El objetivo es tener el mejor motor y el mejor chasis”. No es broma, Mercedes y Ferrari ya andan algo moscas. McLaren-Honda ya no va de farol.

El discurso se ha vuelto más realista, medianamente humilde y sin grandes pretensiones. El objetivo, como dice Ron Dennis, no ha cambiado: volver a ganar. Y para ello cuentan con el mejor piloto posible: Fernando Alonso. “Vamos a ganar de nuevo, vamos a dominar de nuevo, y lo haremos juntos, con Fernando. Va a ser una culminación maravillosa de su brillante carrera”, proclama Ron Dennis. Porque, como canta Izal, este es el momento y esta es ‘su’ pequeña gran revolución para volver a triunfar en la Fórmula 1.

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