Contador: «Es un orgullo que me hayan comparado con Pantani, decir su nombre es decir espectáculo»

Contador
Alberto Contador posa en el acto. (EFE)

El exciclista español Alberto Contador se mostró «orgulloso» de su recién acabada carrera deportiva y por ser recordado «por ser atrevido y hacer cosas diferentes», dejando claro el «orgullo» que siente cuando le comparan con Marco Pantani, mientras que demandó, en relación a su trabajo con su Fundación, «invertir en la base», y aseguró ir «paso a paso» con su equipo ciclista.

«Me emociona ver imágenes de mi carrera. Estoy contento y orgulloso, pero todavía no me ha dado a pensar en lo que he conseguido y ahora que voy poco a poco colocando cosas te das cuenta porque en la competición siempre piensas en la siguiente carrera», comentó Contador durante los Desayunos Deportivos de Europa Press patrocinados por Repsol, Liberbank y Loterías y Apuestas del Estado.

El de Pinto celebró haber quedado «en la memoria de la gente por ser atrevido, por hacer disfrutar y por hacer cosas diferentes». «Alguna vez me han comparado con Pantani y es un auténtico orgullo. Quizás él no tuvo el palmarés más brillante, pero todo el que dice ese nombre lo une a espectáculo», se sinceró.

En este sentido, reconoció que «muchas veces» no había conseguido «el resultado» por su estilo y que había puesto «en riesgo ciertas victorias». «El mayor ejemplo es esta Vuelta. Tuve un mal día, perdí mis opciones, pero eso me dio la oportunidad de perder a mi manera y hacer una Vuelta diferente, sin calculadora y atacando cuando me apetecía», indicó.

«Ves como la gente se te acerca y te dice lo que ha disfrutado con la Vuelta. Hay gente que me ha dicho que lloró el día del Angliru y me emociona aportar mi granito de arena», añadió al respecto Contador, experto en hacer «movimientos inesperados» en ciertos momentos que «las carreras iban relativamente tranquilas o en etapas de transición». «Ese factor sorpresa me permitía tener un gran rendimiento y, como líder de mi equipo, que mis compañeros estuviesen motivados», subrayó.

El madrileño dejó claro que ahora que se ha retirado no está «más tranquilo». «Llevo meses superintensos y con una agenda increíblemente apretada, pero estoy contento de tener muchísimos proyectos y objetivos por delante. Realmente estoy contento de cómo ha terminado mi carrera y a medida que se acercaba la retirada te da respeto el ‘ahora qué’. Soy una persona muy activa y la vida se trata de ilusiones y hay que aprovecharlo», puntualizó.

Así, no ha parado «en casa» ni tiene la «esclavitud» de la alimentación ni de «dormir ‘x’ horas», por lo que va «a contrarreloj tratando de optimizar todo el tiempo». Una de sus citas será acudir este miércoles a la presentación del Giro de Italia del año que viene. «Es una carrera muy especial, que ha marcado mi carrera y en la me siento como en casa», confesó.

De todos modos, pese a las peticiones en redes sociales de que continuase en el ciclismo, remarcó que era «el momento perfecto para dejarlo». «Físicamente me encuentro bien y hay que saber elegir cuando es el momento. Hice una apuesta arriesgada de fuese la Vuelta mi última gran carrera y me ha dejado muy buen sabor de boca. Tengo la bici más aparcada de lo que me gustaría porque no tengo tiempo libre y me apetece salir más con la de montaña, pero no puedo por mi lesión en la mano. Ya estoy seis kilos y medio por encima de peso de la Vuelta», detalló.

Contador se siente «reconocido en España» y «orgulloso» del que tiene en otros países y se queda como «victoria más especial» la conseguida en el Tour Down Under de 2005, un año después de sufrir un ictus. «El ciclismo es mi pasión, pero no es mi vida. Cuando me pasó lo del ictus era bastante joven y el ciclismo era secundario. Pude pensar de nuevo en el ciclismo aunque a los doctores no se les pasaba por cabeza que pudiera volver. Fue increíble que después de mes y medio entrenando llamase a mi familia para decir que había ganado», confesó.

El ganador de siete ‘grandes’ se dio cuenta de «la grandeza» del Tour de Francia cuando veía los «videos de Pinto revolucionado» o del «pueblo» de sus padres y recalcó que la Vuelta es «especial». «Como en casa no se está en ningún sitio, me he sentido querido en todos los sitios y la Vuelta pasa por sitios donde has vivido, entrenado o criado y ves a tu gente y eso lo hace especial, son recuerdos imborrables», admitió.

«Hay que invertir en la base»

Alberto Contador también habló de su trabajo con su Fundación, la que creó hace seis años «con el objetivo de devolver» lo que el ciclismo le había dado. «El ciclismo tiene valores buenos de sacrificio, superación y esfuerzo, no habituales en la sociedad. Hay más bicis en trasteros que balones de fútbol», recordó.

Además de citar su proyecto solidario de recogida de bicis usadas para ayudar a otros países, el de Pinto también se refirió a la vía formativa, donde han ido «año a año dando pasos firmes subiendo en todas las categorías» con un equipo juvenil y Sub-23. «La base no goza de la misma salud y hay que invertir si queremos seguir disfrutando de grandes victorias», avisó.

Ahora, también está involucrado en el Trek-Polartec de categoría Continental Profesional, cuyo manager es el italiano Ivan Basso y el director, Jesús Hernández. «Queremos que sea un referente a nivel mundial. Podríamos haber dado un salto mayor, pero queremos ir paso a paso», aclaró.

«Todos los patrocinadores son extranjeros y es una pena que no haya más nacionales cuando es un deporte tan rentable, pero estoy ilusionado. Este proyecto sería inviable sin mi hermano Fran y tenemos a Ivan Basso, que es un grandísimo campeón y mejor persona. Estuvimos dos o tres años juntos y ahora tenemos un proyecto realmente bonito y atractivo para el futuro del ciclismo y que va a ocupar la gran parte de mi tiempo», agregó el exciclista.

De todos modos, puntualizó que este proyecto no hereda la idea del que podría haber salido junto a Fernando Alonso. «Es completamente diferente, fue hace bastantes años. Este sale de los chavales a través de las escuelas y de la Fundación, y pensamos en seguir creciendo. La crisis parece que ha mejorado un poco, pero ha frenado la entrada de sponsors, pero yo les invito a que lo conozcan y también nuestra forma de trabajar para que vean que es interesante», declaró, descartando ser en el futuro «manager ni director deportivo» porque ha soportado «mucha responsabilidad y presión» y ahora quiere vivir el ciclismo «un poco desde fuera».

A nivel de anécdotas, rememoró que cuando empezó era «muy bueno subiendo, pero bajando no». «Un día en la Vuelta a Valencia un director me dijo que había visto en mí algo que no había visto nunca. Me dijo que cómo se podía bajar tan mal», indicó con una sonrisa, puntualizando que «encima» de la bicicleta los descensos son «menos peligrosos que en la tele». «Quizás da más miedo cuando el pelotón va a 60 km/h porque en cuanto se cae uno, vamos el resto detrás», consideró.

Igualmente, subrayó que en su juventud no podía «tener lujos» y se podía comprar una bici nueva por lo que no paraba de «echar la quiniela y la Primitiva» para ver si le tocaba. «Lo importante era la motivación por ser ciclista», destacó.

Finalmente, pidió «concienciar tanto al ciclista como a los conductores» para evitar los fatales accidentes de tráfico de los últimos años. «Sobre todo el respetar el metro y medio. Son millones de personas las que montan en bici y desafortunadamente se te puede cruzar alguien bajo los efectos del alcohol o las drogas, pero creo que la gente está bastante mentalizada», sentenció.

Lo último en Deportes

Últimas noticias