Juancho Hernangómez, un «semental salvaje» español en la NBA

Cuando Juancho Hernangómez decidió marcharse a la NBA este pasado muchos vieron en él a un imprudente. Quizá por su juventud o por acordarse del guantazo que se dio Sergio Rodríguez cuando hizo algo parecido en 2006, muchos auguraron un futuro incierto para el alero. Elegido el número 15 del draft por los Denver Nuggets, al madrileño no le garantizaban que fuera a tener ni siquiera un puesto en el equipo. Dos meses después se ha convertido en una de las grandes sensaciones de la pretemporada NBA.

Juancho rechazó este verano acudir como invitado a la selección española para aclimatarse a la NBA y disputar la Liga de Verano. Allí su papel en los Nuggets fue increscendo y todos vieron en él lo que los ojeadores habían prometido: un alero versátil, fuerte y con mucho potencial.

Las comparaciones con Danilo Gallinari, la estrella de los Nuggets, no se hicieron esperar por parte de la prensa, pero Juancho las ignoró por completo dedicándose a hacer su juego. En esta pretemporada, el mediano de la saga Hernangómez ha despuntado con jugadas espectaculares como un gran mate ante los Lakers.

OH, JUANCHO 💪#Nuggets pic.twitter.com/qM621LVEZI

— Denver Nuggets (@nuggets) October 10, 2016

El crecimiento de Hernangómez se asemeja imparable. Sin ir más lejos, fue el jugador que más tiempo permaneció en la cancha en el último partido ante los Golden State Warriors y sus promedios –6,6 puntos y 4,8 rebotes en 19,7 minutos– no dejan lugar a dudas de que va a tener mucho que decir en su año de novato en la NBA.

Tanto es así que su técnico, Mike Malone, le dedicó una palabras que muy pocos rookies pueden lucir en su haber. «Lo que me encanta de Juancho es que es como un semental salvaje. Juega muy duro. A veces no sé qué diablos va a hacer, pero sé que lo hará con dureza. Ataca el aro, rebotea y crea jugadas. Si sigue así se convertirá en un jugador terriblemente bueno. Me pongo en su lugar y soy capaz de ver que tiene mucho que ofrecer», aseguró el técnico. No sabemos si ha nacido una estrella, pero sí un jugador con mucho futuro en la NBA.