Motivos del fin del ciclo: siete de los once titulares pasarán de los 30 años en el Mundial de Rusia

España
Alineación de España en la Eurocopa. (Getty)
Nacho Atanes
  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

España debe cambiar su estrategia de cara al próximo Mundial de 2018 tras el fracaso en Francia. De los once titulares de Vicente del Bosque en la Eurocopa, solo cinco de ellos no superarán la treintena en la cita que se celebrará en Rusia, algo a tener en cuenta de cara a la preparación y una posible reestructuración de los seleccionables basada en la juventud.

Juanfran, Gerard Piqué, Sergio Ramos, Andrés Iniesta, Cesc Fábregas, David Silva y Nolito llegarán – y salvo retirada voluntaria – a la cita mundialista de 2018 con más de 30 años a sus espaldas, lo cual imposibilita la progresión de un combinado, el español, que necesita imperiosamente caras nuevas que definan su estilo después de los dos últimos fracasos.

La sequía de centrales en los últimos años hará que dos baluartes de la defensa como Piqué y Ramos deban mantenerse en su mejor estado a dos años vista, pues se cuenta con ellos como los pilares que sustenten la zaga de España, pero en los laterales la renovación podría ser notoria. Juanfran no ha convencido en los encuentros importantes de la Eurocopa y a sus 31 años podría caer en el olvido en futuras convocatorias, más aún si Del Bosque, su principal valedor, no continúa a los mandos del combinado nacional.

Carvajal y Bellerín, podrían ser esa opción de futuro para el lateral derecho, mientras que el polivalente Azpilicueta – cuatro años más joven que el colchonero – podría también opositar a esta plaza, toda vez que el carril izquierdo parece cerrado para Jordi Alba, que llegará en plena madurez a territorio ruso. La portería, a la espera de nuevas apariciones, parece coto cerrado de David de Gea, uno de los mejores del mundo en su posición y digno sucesor de Casillas.

La línea de medios, salvo sorpresa, seguirá contando con el que será el principal veterano de la selección, Andrés Iniesta. Al igual que ocurre con Sergio Ramos y Piqué, no se entiende una España sin él, aunque vaya a llegar a la cita con 34 años. No podrán caer tantas responsabilidades en él, y por ello se deben potenciar las figuras de Thiago, Koke e Isco, con Saúl como comodín pero fijo en las próximas convocatorias, si continúa con la progresión del último año. Busquets, que por entonces rozará la treintena, necesitará de un sustituto para dosificarle. 

En la delantera, los nombres de Morata y Lucas Vázquez inspiran gran confianza, mientras que una mejora esperada en Diego Costa y Alcácer podría cubrir la posición de punta de manera casi perfecta. La progresión, por el momento estancada, de Jesé y Deulofeu, que aspiraban a estrellas de talla mundial, también puede condicionar la zona de ataque de la nueva España.

Seguir contando con los más jóvenes

Antes de la convocatoria definitiva, Del Bosque incluyó un núcleo de jóvenes jugadores que incluso llegaron a debutar con la Absoluta en los amistosos previos. Casos como los de Jorge Meré o Diego Llorente – también Vallejo, ausente por la falta de continuidad provocada por las lesiones – en defensa, Denis Suárez, Fornals y Asensio en las posiciones de centro del campo y extremos, e Iñaki Williams en la punta de ataque deberán ser considerados para ir incluyéndoles en las listas siempre y cuando continúen destacando en la élite. Ellos son el futuro.

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