¿Por qué tu cerebro nunca deja de crecer?

Cerebro
¿Por qué tu cerebro nunca deja de crecer?

Hasta hace no mucho se creía que el alcohol y otras sustancias mataban las neuronas. Los nuevos estudios han demostrado que las pueden dañar, pero no acaban con ellas. De hecho, ahora se sabe que nuestro cerebro nunca deja de crecer y de fabricar neuronas nuevas. Veamos cómo es posible.

Según un equipo de neurólogos de la Universidad de Columbia, en el cerebro de un adolescente se encuentran tantas neuronas nuevas como en el de un anciano. Es decir, nunca se dejan de fabricar.

Obviamente, este nuevo descubrimiento tiene unas implicaciones fantásticas en la medicina. Ahora se podrían tratar con mucha más eficacia enfermedades neurodegenerativas como el temido alzhéimer.

Antaño se pensaba que el cerebro dejaba de crear nuevas neuronas superada la infancia. Esto se interpretaba en la dificultad de los adultos para adquirir nuevos conocimientos y habilidades.

Ahora se ha descubierto que su se híper estimulan ciertas zonas, se pueden formar nuevas células. Pero la investigación que aquí nos ocupa va mucho más allá, puesto que estas neuronas se estarían creando en todo momento, incluso ahora mismo en tu propio cerebro.

Las sinapsis del cerebro

Según estos resultados, las capacidades perdidas según la edad no estarían relacionadas con la falta de neuronas que mueren, sino con los fallos de estas células cerebrales para comunicarse entre sí.

Es decir, que las neuronas del hipocampo humano están naciendo siempre, tanto si somos más jóvenes como si somos muy mayores. Sin embargo, la mala vascularización de los organismos ancianos impide que las neuronas nuevas establezcan buenas conexiones.

Y ahí radica la importancia de este descubrimiento. Ahora, puede ser más fácil descubrir las causas que provocan las demencias, de manera que será mucho más sencillo evitar que ocurran.

Este avance llega en buen momento, puesto que el avance de las enfermedades neurodegenerativas no deja de aumentar. Por eso, este experimento, que observó el hipocampo en individuos entre 14 y 79 años de edad muertos de forma repentina es tan importante.

Entre los individuos, no había episodios de depresión o deterioro cognitivo. En todos sus cerebros observamos que la formación de neuronas no se había detenido, de hecho, se habían fabricado nuevas hasta el último momento. La única diferencia era que en los ancianos los vasos sanguíneos nuevos eran menos numerosos entre las estructuras cerebrales, y tenían muchas menos células progenitoras, es decir, células madre que se terminan por convertir en neuronas jóvenes. De ahí la importancia de este descubrimiento, pues tendrá muchas implicaciones positivas.

Lo último en Ciencia

Últimas noticias