¡Cuidado! Un parto en el agua ha estado a punto de causar la muerte de un bebé

parto en el agua
Un parto en el agua ha estado a punto de costarle la vida a una recién nacida

Cada vez son más las mujeres que deciden dar a luz fuera del hospital. Sí, prefieren hacerlo en casa con ayuda de una comadrona y adoptando posturas más cómodas o bien en el agua. Sin embargo, siempre hay que confiar en una profesional especializada que pueda acometer el proceso de la manera más segura para madre e hijo. Y es que en caso contrario puede suceder como el caso que ahora ha saltado a los medios de comunicación. Nos estamos refiriendo al de la bebé que ha estado a punto de morir por una infección que ha sufrido al nacer mediante un parto en el agua.

¿Quieres conocer la historia? Te la contamos a continuación:

¿Dónde ha sucedido?

En Canadá exactamente es donde se ha producido este caso que ha sido dado a conocer a través de publicaciones como “Daily Mail” e incluso como la revista científica “CMAJ”. El motivo de llevarlo a sus páginas ha sido advertir a las mujeres que deben elegir muy bien cómo dar a luz y con la asistencia adecuada.

Las protagonistas

Tres podemos decir que son las figuras en torno a las cuales gira la historia:

  • La bebé que ha estado a punto de morir a los ocho días de haber nacido por culpa de una infección.
  • La madre que decidió dar a luz a su hija en casa y en el agua.
  • La matrona que se encargó de controlar el alumbramiento.

La madre decide llevar a cabo el parto en el agua

Todo sucede meses atrás cuando la embarazada decide que quiere dar a luz a su bebé en casa. Quiere estar más tranquila, en un ambiente más relajado donde pueda sentirse más cómodo y que permita a su pequeña nacer ya en el que va a ser su hogar. Por eso, opta por contratar a una matrona a la que le indica que desea que la niña nazca en el agua.

De esta manera, se llevan a cabo todos los preparativos. Así, los días previos a la llegada al mundo del bebé, se procede a llenar de agua la bañera de hidromasaje de la casa donde se producirá el alumbramiento. Y es que esa es una práctica habitual, sí, el llenar antes la bañera en cuestión para luego calentarla.

El momento tan esperado llegó a los tres días. Todo transcurrió con normalidad y vino al mundo una pequeño sana y en perfecto estado.

La bebé enferma

La familia que acababa de ampliar la familia con la llegada del bebé estaba encantada y feliz. Sin embargo, todo se torció a los ocho días del nacimiento. Y es que fue en ese momento cuando la niña empezó a tener fiebre muy alta, sarpullidos, ritmo cardíaco acelerado, no quería comer y estaba especialmente nerviosa. De ahí que sus padres decidieran llevarla urgentemente al hospital para que pudiera ser atendida.

Allí los médicos tuvieron que actuar de urgencia, ya que los órganos de la pequeña comenzaron a fallar por lo que se procedió a tenerla ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

¿Qué le sucedió?

Como es lógico, los doctores encargados del caso empezaron a realizarle pruebas para saber cuál era la causa de su estado. Y rápidamente encontraron una respuesta: había sufrido una sepsis, una infección, a consecuencia de haber nacido en el agua.

En concreto, lo que sucedió es que el hecho de haber llenado la bañera días antes propició que en la misma se favoreciera la creación y concentración de bacterias como la Legionella. Bacterias que habían afectado notablemente a la bebé ya que su sistema inmune aún era bastante débil.

Afortunadamente el rápido diagnóstico que se le realizó permitió que se le estableciera el tratamiento adecuado que ha permitido que ya haya recibido el alta. Así, después de haber pasado cinco semanas conectada a un respirador en la UCI y administrándole antibióticos, ha recibido el alta. Ahora ya está en casa con la familia y recuperada, pero podría haber muerto si no se hubiera descubierto la causa de su problema.

Recomendaciones

A raíz del caso de esta pequeña de Canadá, son muchos los médicos entrevistados en medios de comunicación de su país y de otros rincones del mundo como Londres que han querido advertir de los peligros de parir en el agua. Así, han expuesto que, aunque es una opción beneficiosa para la mujer porque disminuye sus dolores, puede poner en serio peligro al bebé como le ha sucedido a la protagonista de esta historia.

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