Varices en el embarazo. Todo lo que necesitas saber

varices
Las claves de las varices que sufren muchas gestantes

Muchos son los síntomas a los que tiene que hacerle frente la mujer cuando se encuentra embarazada. Precisamente entre esos se encuentran las varices, que se hacen visibles en las piernas y que pueden comenzar a hacer acto de aparición a partir de la semana número 14 de gestación.

Si quieres conocer todo al respecto de las mismas, sigue leyendo.

¿Qué son?

Lo primero y más importante es que tengas claro qué son las varices. En ese caso, tenemos que establecer que también responden al nombre de venas varicosas. Es decir, son venas dilatadas y de tono azulado o morado que se ven claramente en la superficie de la piel.

Por regla general, lo habitual es que aparezcan en las piernas. No obstante, eso no quita para que haya mujeres a las que les nacen en lo que es la zona de la pelvis.

Eso sí, tenemos que dejar claro que, como sucede con otros síntomas del embarazo, no todas las futuras mamás las sufrirán ni siquiera las que las tengan contarán con las mismas consecuencias.

varices
Venas dilatadas

Causas y síntomas de las varices en el embarazo

Esas venas azuladas y dilatadas son la principal señal de que se tienen varices. Sin embargo, hay que tener en consideración que las mismas pueden generar dolor, picazón, sensación de cosquilleo e incluso dolor en las piernas.

Sea como sea, hay que tener en cuenta que lo que las causa es el aumento del útero durante el embarazo. Y es que ese crecimiento trae consigo que se haga más presión sobre la vena cava inferior, lo que propiciará, a su vez, mayor presión en las venas que se encuentran en las extremidades inferiores.

Esa circunstancia, unida al aumento de los niveles de progesterona y de la sangre que hay en el cuerpo, es la que da lugar a la posible aparición de varices durante los nueve meses de la gestación.

varices
Nada de tacones

¿Qué hacer?

En el caso de que una fémina se tope con la existencia de varices en sus piernas durante el embarazo, debe tranquilizarse. No es nada grave y lo que debe hacer es seguir las siguientes indicaciones. En concreto, debe optar por llevar a cabo las siguientes medidas:

  • Es importante y necesario que beba a diario entre 1,5 y 2 litros de agua.

  • Salvo que esté afrontando un embarazo de alto riesgo, tiene que hacer ejercicio de manera regular. En concreto, es recomendable que, como mínimo, camine todos los días una media hora aproximadamente.

  • Debe incluir en su alimentación muchas frutas y verduras.

  • Fundamental es que no se ponga ropa demasiado ajustada, especialmente medias y calcetines que compriman mucho lo que son las piernas y tobillos. Y eso supone que también deje de lado el empleo de zapatos de tacón.

  • Cuando descanse, tiene que poner las piernas en alto. Lo ideal es que estén unos 25 centímetros por encima del corazón.

  • Debe evitar estar mucho tiempo de pie o sentada.

  • Periódicamente le serán idóneas duchas de agua fría en las piernas, que activará la circulación sanguínea, y debe evitar depilarse con cera caliente.

  • Los masajes en las piernas que van desde abajo hasta arriba también estarán muy recomendados para poder hacerle frente a las varices.

  • Cuando esté sentada, es importante que evite cruzar los tobillos y las piernas.

  • Fundamental en pro de conseguir que no aparezcan las varices o, al menos de que no empeoren, es llevar a cabo una dieta sana, completa y equilibrada. De esta manera, se conseguirá no aumentar de peso de manera excesiva, ya que el sobrepeso facilitaría el nacimiento de esas venas dilatadas.

varices
Ejercicio periódico

Otros datos de interés

Además de todo lo expuesto hasta el momento, se hace necesario conocer otros aspectos interesantes sobre las varices en el embarazo, tales como estos:

  • Las gestantes con antecedentes familiares con este síntoma, las que tienen obesidad o las que afrontan un embarazo múltiple son las que poseen más probabilidades de sufrirlo. A esta lista también se incluyen las mujeres que pasan mucho tiempo de pie por motivos laborales.

  • Por regla general, el estado de las varices mejora tras el parto, concretamente a los tres o cuatro meses. Para ayudar a eso se debe optar por practicar ejercicio de manera regular y no permanecer mucho tiempo sentada o de pie.

  • En algunas ocasiones, las varices pueden complicarse e ir asociadas a la formación de coágulos de sangre. En ese caso o ante sospechas del mismo será necesario y urgente acudir al médico. Este examinará a la paciente y tomará las medidas oportunas en pro de evitar “males mayores”.

Síguenos en Facebook y podrás conocer no solo más síntomas habituales del embarazo sino también la manera de poder combatirlos y reducirlos.

Lo último en Bebés

Últimas noticias