Síndrome de la Covada: tu chico se embaraza al mismo tiempo que tú

Cuando tienes intención de quedarte embarazada o cuando acabas de descubrir que estás esperando un bebé, es importante que empieces a adquirir conocimientos. Nos estamos refiriendo, en concreto, a que debes ponerte al día en cuanto a términos que tienen que ver con el periodo de gestación. Y entre esos destaca el que ahora te queremos presentar: el Síndrome de la Covada.

¿No sabes qué es? Te lo contamos a continuación, ten por cuenta que te va a sorprender.

El Síndrome de la Covada

Bajo esta denominación que nos ocupa, se encuentra una situación que posiblemente no sepas que tiene lugar. En concreto, se refiere a que cuando una mujer se queda embarazada, su chico también al mismo tiempo. No se trata de que este se encuentre embarazado de manera física y biológica, sino que lo sienta y lo piense así.

Viene a ser una especie de empatía que muestra con su pareja y que le lleva a tener incluso las mismas sensaciones que la futura mamá.

Síntomas que experimenta

Como bien sabrás, una de las principales circunstancias a las que tiene que hacer frente la mujer que está esperando un bebé es a sufrir numerosos síntomas. Y esto es algo que también le sucederá al futuro padre.

Sí, como lo estás leyendo. Según los estudios llevados a cabo al respecto, se ha venido a determinar que es muy habitual que entre los síntomas más propios del periodo de gestación que padecen los hombres se encuentran estos:

• Aumenta de peso. En el caso de la fémina es debido a que su cuerpo va cambiando y creciendo conforme lo va haciendo el bebé. No obstante, si su chico también coge kilos de más es porque encuentra en la comida la manera de poder calmar las preocupaciones o los temores que siente ante la llegada de su hijo.
• Problemas para conciliar el sueño. La embarazada en determinados momentos del periodo de gestación va a tener serias dificultades para dormir del tirón. Será así tanto porque le preocupa el estado del bebé como el parto e incluso porque el vientre abultado no le permite adoptar la postura más cómoda. Por el contrario, en el caso del futuro papá si no descansa tan bien es porque se preocupa de cómo estará el niño, de si el alumbramiento irá bien, si será capaz de cuidarle adecuadamente, de cómo cambiarán sus vidas…
• Menos deseo sexual. Aunque hay excepciones, lo habitual es que las gestantes presenten menos ganas de tener relaciones sexuales, porque los síntomas que tienen no favorecen en absoluto su deseo. En el caso de los varones, por su parte, si disminuye su libido es, sobre todo, porque siguen creyendo en el mito de que tener sexo durante el embarazo puede causarle algún daño al bebé.
• Dolores. La revolución hormonal y los cambios físicos que experimentan las futuras mamás les lleva a tener que hacerle frente a problemas de ciática e incluso a hinchazón de piernas, entre otras dolencias. Según el Síndrome de la Covada, sus parejas también se quejan de dolores similares. Es cierto, que los estudios realizados al respecto no han encontrado una razón física a ese malestar masculino. De ahí que se determine que es fundamentalmente una manera de “llamar la atención de su chica”, pues posiblemente esté centrada en el bebé y en su llegada.

Otros datos de interés

Además de todo lo expuesto acerca de este peculiar embarazo masculino, podemos destacar otras particularidades que puede ser que puedas percibir en tu pareja si ahora estáis esperando un hijo:

• Se ha podido conocer que otros síntomas habituales que presentan los hombres en estos casos son ansiedad, cambios constantes de humor, acidez de estómago y estrés.
• El término covada deriva de una palabra francesa, “couver” (criar). Esta se utilizaba en el siglo XIX para explicar los singulares rituales masculinos que se desarrollaban en algunas tribus cuando se esperaba la llegada de un bebé. En concreto, era frecuente que los hombres se dejaran mimar como si estuvieran gestando e incluso se recluían después del parto como si tuvieran que recuperarse como hacían sus esposas.
• Se considera que fue en la década de los años 40, concretamente en 1945, cuando se empleó por primera vez como lo entendemos hoy el término Síndrome de la Covada. Fue creado por dos psiquiatras: Michael Conlon (Hospital All Saints de Birmingham) y William Trethowan (Universidad de Birmingham).
• En ese afán por demostrar empatía con sus mujeres embarazadas, hay varones que incluso llegan a tener los mismos antojos u otros diferentes.
• Por regla general, esta situación de que el hombre se sienta también “esperando un hijo” desaparecerá en el momento que se produzca el nacimiento real del bebé.

Síguenos en Facebook y aprenderás más curiosidades sobre el periodo de gestación.